| INGENIERO JACOBACCI (AJ).- Con precios tonificados, producto de una mayor demanda del exterior, la producción de lana continúa siendo una alternativa sumamente interesante para explotar en la región. La aplicación de tecnología en este tipo de actividad es clave para sostener un desarrollo sustentable de una explotación, sea ésta de tamaño pequeño, mediano o grande. La incorporación de un innovador sistema de cría en ovinos está dando resultados muy positivos en distintos campos de Sudamérica. Esto quedó reflejado en la reunión anual de cabañas que trabajan en red bajo el Sistema Merino Multipropósito, que se realizó durante esta semana en el establecimiento ganadero "La Amalia", propiedad de la firma García Hermanos, distante a 45 kilómetros de esta ciudad. Allí, productores y multiplicadores del sistema de Río Negro, Corrientes, Santa Cruz y de Punta Arenas (Chile) realizaron una evaluación sobre el trabajo que se lleva a cabo desde hace cinco años en este campo de la Región Sur rionegrina y definieron estrategias a seguir en el próximo año. Son conscientes de que trabajando en forma coordinada se optimizan los resultados a campo. El sistema que este grupo de productores está aplicando tiene como objetivo mejorar las características de la lana, carne y fecundidad de los animales que producen fibra, a través de la incorporación de genética australiana, un sistema de selección innovador y el manejo de pastizales. Los resultados obtenidos por el grupo son muy positivos. "Estamos viendo resultados muy consistentes y mejoras muy importantes en la calidad y cantidad de la lana que produce la oveja y, a su vez, en la mayoría de las majadas se ha mantenido o ha aumentado el peso de los corderos e incrementado el porcentaje de señaladas. Además estamos generando un proceso de cambio tecnológico bastante fuerte en la producción ovina de la región. Eso es muy positivo", sostuvo el Ingeniero Agrónomo Pablo Borrelli, gerente general de Ovis XXI, empresa que dirige una red de productores y técnicos que está introduciendo esta tecnología en Sudamérica. "La Amalia" es una de las nueve cabañas de Merino Multipropósito en Sudamérica y la única en Río Negro. Además existen en la provincia trece productores comerciales que utilizan esta tecnología. La experiencia en la cabaña de la Región Sur se puso en marcha hace cinco años. Durante los dos primeros años se hizo la clasificación de animales y en los restantes se incorporó nueva genética a través de inseminación artificial por vía laparoscópica e inseminación en fresco, en forma conjunta con la intervención de un clasificador australiano. El administrador de la cabaña, el médico veterinario Marcelo García, afirmó que el cambio más grande está dado en el tamaño de las ovejas, al señalar que del merino australiano, un animal pequeño y arrugado, se pasó a tener ovejas con un gran desarrollo corporal, lisas y de lanas muy suaves. A esto se le suma un incremento de casi el 10% en el porcentaje de señalada de corderos. "Ahora producimos animales con más carne, más kilos de lana y de una calidad superior, que es la que demanda y paga el mercado. Además hemos crecido de un 70/ 75% a un 90/95% de señalada. Si a esto le sumamos que estamos a punto de pasar de una esquila anual a hacer tres cada dos años en los mejores animales, estamos hablando de resultados excelentes. Y lo bueno de esto, es que se han dado en todas las cabañas donde se aplicó el sistema". El campesino afirmó que, en cinco años de trabajo, la lana que producen los animales ha bajado, en promedio, una micra el grosor de la fibra e incrementado el rinde promedio entre un 6 y un 8%. En este sentido detalló que una lana de borrego en lote general que antes daba 18,5/18,7 de finura con rinde del 60/62 %, hoy con la tecnología aplicada está en 17,7 micrones con 68% de rinde al peine (ver gráfico adjunto). Además el peso del vellón aumentó de 4,2 kilos sucio por oveja a 4,7 kilos. En cuanto al desarrollo corporal, el peso de los corderos al destete se incrementó en un 10 a un 12%. Los representantes de las distintas cabañas destacaron el progreso que viene realizando la cabaña de Río Negro. José Manuel Gortazar, médico veterinario que trabaja con este sistema en el sur de Chile desde hace dos años, resaltó los resultados calificándolos como "muy alentadores". "El progreso es muy interesante. Argentina nos lleva unos años de ventaja, pero en Chile estamos partiendo con mucho conocimiento desarrollado y eso va a hacer que sea más rápido en nuestra zona, típicamente productora de la raza Corriedale. Nosotros, recién este año hicimos las primeras esquilas luego de la aplicación de este sistema y la verdad que el cambio en los animales es muy notorio. Creo que va dar mucho de qué hablar en los próximos años", sentenció. De cara al futuro, las cabañas diseñaron estrategias para ofrecer cada vez mejores productos con aseguramiento de calidad, como la aplicación de un protocolo de prácticas que incluye la clasificación de pieles y hacienda, la realización de mediciones objetivas en los parámetros carniceros y un sistema de inspección y caravaneo de los reproductores realizado por un inspector de Ovis XXI. También brindaron un fuerte apoyo a la iniciativa de agregar valor a las lanas especiales generadas por la red. | 
