El diagrama que tiene esta edición de la Vuelta de la Manzana difiere y mucho de otras. Antes pasar la primera etapa casi aseguraba llegar al final. Esta vez, todo lo contrario. La segunda etapa será tan o más dura que la primera, que se convirtió en un verdadero "filtro" para muchos de los que tenían intenciones de buscar la victoria en la "Manzana". La segunda etapa mete miedo. Los tres tramos de ayer, en Cervantes, Canal 10 y aeropuerto, están movidos y en algunos lugares se pueden golpear muy feo a los autos, por lo que seguramente los participantes habrán realizado correcciones en la "hoja de ruta". Cervantes tiene lo suyo y ayer fueron nueve los que no pudieron completar el recorrido. En el de Canal 10 se quedaron unos diez, y en aeropuerto, que se rompió mucho en los dos vados, los organizadores tuvieron que reagrupar a una docena de pilotos después de un vuelco porque el camino quedóobstruido. Hoy, estos tres tramos pueden definir buen a parte de la historia. Pero los que puedan dejar atrás esos escollos todavía tendrán algo más antes de llegar al autódromo roquense y festejar que dieron la "vuelta". Huergo no les gusta a muchos de los participantes, mientras que todos conocen lo que significa el tramo de Chichinales-Regina, si bien antes habrá que pasar por el especial del Motoclub Reginense. Cerca de ochenta kilómetros de velocidad plantean una marcada exigencia para la definición de la "Manzana". Y no solo lo sufrirán los que participan de las divisiones de tracción simple, sino que también habrá que estar atento a lo que pasa con los integrales en la definición de la prueba que reunió tres certámenes. |