El gol del paraguayo Jorge Achucarro, en una de las pocas llegadas sobre el arco defendido por Agustín Orión, le permitió a Banfield no sólo impedir que Estudiantes alcance la cima del torneo Clausura, sino que también le cortó una racha de 16 partidos sin conocer la derrota jugando en condición de local.
El orden en todas sus líneas, y el trabajo individual de Marcelo Carrusca (autor del pase en el gol) y Cristian García, fueron los argumentos que el equipo dirigido por el Gallego Sebastián Méndez utilizó para llevarse la primera victoria del torneo. Estudiantes fue un equipo que nunca encontró el rumbo y por lo tanto casi no tuvo chances de aspirar a la victoria.
Los primeros 45 minutos resultaron muy malos por lo poco y nada que hicieron los 22 protagonistas. En ese mar de mediocridad, Estudiantes fue un poquito más porque asumió el protagonismo, a través de lo que trató de generar Verón, pero careció de las ideas para generar un juego asociado.
El complemento arrancó igual. Ni Estudiantes ni Banfield modificaron su manera de jugar y así le fue al partido. Pero a los 15 minutos, el uruguayo Diego De Souza metió un pase cruzado a la izquierda para Carrusca y éste envió un centro preciso para Achucarro, quien, entre Facundo Rongaglia y Raúl Iberbia, cabeceó al gol.
A partir de entonces a Estudiante le ganó la desesperación, en cambio Banfield encontró la tranquilidad necesaria para manejar el trámite.
Con la ventaja en su favor, en Banfield aparecieron Carrusca y García para manejar la pelota y un compacto bloque defensivo para aguantar los ataques de Estudiantes. Los tibios y desordenados ataques de un Estudiantes al cual ni ayudaron los ingresos de Pablo Barrientos, Leandro González y el uruguayo Hernán Rodrigo López.