Después de un primer tiempo decididamente malo, River encontró 15 minutos a puro fútbol en la etapa final para terminar ganándole con claridad a Huracán 2-0 un partido que le dio mucho aire en la lucha por evitar la Promoción.
Los goles fueron convertidos por Erik Lamela y Paulo Ferrari, quienes definieron tras recibir sendas asistencias de Mariano Pavone. Justamente los tres fueron las mejores individualidades de un River que se quedó con el triunfo con absoluta justicia ante un adversario que llegó al Monumental preparado para defenderse.
Así River le sacó siete puntos a Huracán, uno de sus rivales directos en la puja por evitar la Promoción y se le puso a cuatro a Independiente, su oponente del próximo domingo en Avellaneda.
en la trampa del Globo
Los primeros 20 minutos del juego fueron decididamente malos, con un Huracán que arribó al Monumental con una postura inequívoca, la de intentar defenderse y apostar a una réplica o pelota parada para lastimar a River.
El conjunto Millonario manejó el balón y se dispuso en posición ofensiva, pero fue inconexo y careció de imaginación.
Se repitió casi siempre y cayó una y otra vez en el embudo que planteó Huracán, que ni lograba salir de contra, porque cuando recuperaba el esférico lo perdía muy rápido.
El equipo de Juan José López mejoró levemente a partir de los 20 minutos y, si bien estuvo lejos de convencer, debió terminar el primer tiempo en ventaja porque generó al menos cuatro situaciones de gol.
Toques y goles
Para el segundo período, Miguel Brindisi lo sacó a Angeloff, quien había tenido dificultades para controlar el lado izquierdo del mediocampo, y lo colocó a Claudio Guerra en un cambio ofensivo.
Sin embargo River no le dio tiempo a nada, ya que a los 14 minutos ya estaba 2-0 arriba.
A los dos, Lamela se lo perdió casi debajo del arco y a los cinco se tomó revancha tras la mejor jugada colectiva de River. Acevedo tocó para Pavone y el delantero lo dejó solo a Lamela, quien definió con gran categoría sobre el cuerpo de Monzón.
Siguió intentando River y un cabezazo de Pavone resultó apenas desviado, hasta que a los 14 lo terminó de resolver con una contra: Lamela abrió hacia la derecha para Pavone y el centro del ex Estudiantes encontró libre de marcas a Ferrari para el cabezazo goleador.
Huracán careció de respuestas y River tuvo chances para aumentar, pero no le hizo falta. Con esos 15 minutos de fútbol le alcanzó para volver a ser feliz.