Los neuquinos se quedaron con todos los puntos en sus duelos ante los rionegrinos. Por la zona 76, Alianza metió un pleno de novela, porque le ganó a domicilio a Fernández Oro con el plus de haber jugado con dos hombres menos durante 40 minutos. Mientras que Centenario arrancó bárbaro en el grupo 77, ya que en su cancha venció por 2-1 a un Catriel que sumó su segunda caída.
En la cancha del Trueno Verde hubo dos partidos: el primero se jugó en la etapa inicial y terminó con una buena ventaja para la visita porque fue mucho más inteligente; el segundo se disputó en el epílogo y estuvo plagado de errores e imprecisiones.
Lo cierto es que el Gallito ganó con justicia un partido que tuvo en la palma desde el PT, ya que se fue al descanso por 2-0.
El primer tanto cayó sobre los 12, cuando increíblemente un largo pelotazo encontró solo a Patricio Panei, que encaró a Guillermo Navarro y no perdonó.
El Pato, de lo mejor en esa etapa, volvió a hacer de las suyas sobre los 22, desbordó por derecha y le dijo ´tomá y hacelo´ a Andrés Romano, que la empujó a la red. A esa altura, el equipo de Claudio Sícolo era pura frustración.
La cosa cambió en el despertar del ST. A los 4 descendió un balón en el área del Gallito, Romano derribó a Fernando Castro, el jugador visitante fue expulsado y el ´8´ cambió penal por gol.
El nuevo dolor de cabeza para Roger Morales surgiría cuando Villagra vio la roja. Fue entonces que la visita se olvidó de atacar y que el local puso más gente de ataque ¿Por qué no consiguió sumar Oro entonces? Porque careció de ideas para intentar quebrar la muralla defensiva del rival. La última para empatar estuvo en los pies de Pablo Parra, pero su disparo pegó en la barrera.
En el Gigante del barrio Sarmiento, el local se quedó con los tres puntos porque Catriel se cansó de fallar cerca del arco de Javier Berra y, sobre todo, porque estuvo Matías Iturra.
El Manco volvió a demostrar que es un atacante de temer. Rápido y más maduro, fue una pesadilla para la defensa visitante. La apertura del marcador fue suya después de una buena jugada colectiva y el 2-0 una contra que encabezó y que terminó con una falta a él mismo adentro del área, que cambió por gol Chávez.
Fernando Lobos descontó de penal, pero ya era tarde para los rionegrinos.