Cuando parecía que Estudiantes sólo iba a sumar un punto en su incursión al Libertadores de América. Cuando, en Liniers, Vélez ya imaginaba un triunfo mañana que lo devolviera a la cima con el Pincha. Cuando todo esto estaba por pasar, apareció la cabeza de Gastón Fernández y Estudiantes le ganó 2-1 a Independiente.
Entonces, el equipo de Alejandro Sabella se llevó tres puntos en vez de uno, mantuvo su diferencia con Vélez, que lo mejor que puede pasarle es seguir dos puntos abajo.
El delantero Juan Pablo Pereyra había abierto el marcador para Estudiantes, que sigue firme en la cima del torneo Apertura y que ahora le sacó cinco puntos de ventaja a Vélez, que mañana cerrará la 16º fecha con Tigre. El líder terminó con diez jugadores por la expulsión de Enzo Pérez.
Con la cabeza puesta en la final de la Sudamericana, Independiente mostró un equipo con mayoría de juveniles que tuvo un correcto rendimiento.
La primera parte comenzó con buen ritmo, porque los dos equipos salieron a buscar el arco rival, aunque fue Estudiantes el más peligroso por el juego colectivo que desplegaron sus hombres de ataque. Independiente tuvo mayor tiempo la pelota, pero lateralizó demasiado y le faltó profundidad. El gol de Pereyra, a los 11 minutos, no cambió el desarrollo del partido: Independiente era el dueño de la pelota y Estudiantes esperaba la oportunidad para aumentar.
En el complemento, con el ingreso de Rodríguez Independiente tuvo más explosión enofensiva. Al minuto de juego, desbordó por izquierda, tiró un centro y apareció solo Nicolás Martínez, quien marcó el 1-1.
Independiente tuvo pasajes de buen juego, pero otra vez le faltó contundencia. Estudiantes estuvo perdido durante buena parte del complemento. El ingreso de Hernán Rodrigo López le dio otra alternativa al Pincha y de a poco el encuentro se fue jugando en el área de Gabbarini. A los 40, Fernández conectó de cabeza un centro desde la derecha y le dio a Estudiantes un triunfo que le asegura la punta une soledad.