La Unión Argentina de Rugby (UAR), además de acceder al pedido de Neuquén de retrasar un día el partido -lo pasó de sábado a domingo-, para permitir un mayor descanso por el largo viaje, modificó el horario y reprogramó de las 15:30 a las 17.
La comunicación de la organización nacional con la Unión Salteña fue correcta y también con el árbitro Francisco Pastrana, pero lo que falló es la "línea" de esa entidad con el club Gimnasia y Tiro, que no se enteró del cambio.
Convocaron al equipo y a los aficionados para la hora original y cuando se enteraron de la demora se pusieron visiblemente molestos.
Igual, no les quedó otra que armarse de paciencia.