Rafael Nadal se adjudicó su séptimo título de la temporada al ganarle al francés Gael Monfils en la final del torneo de Tokio.

El 6-1 y 7-5 del final es la evidencia clara de que el número uno se recuperó bien del duro partido que ganó el sábado en semifinales al serbio Viktor Troicki, quien tuvo dos match point pero acabó perdiendo por 7-6 (7- 4), 4-6 y 7-6 (9-7).

El español se convirtió en el cuarto hombre en 2010 que consigue alzarse con un título ATP tras salvar bolas de partido durante la semana. Los otros tres son los estadounidense Sam Querrey y John Isner y el ruso Nikolay Davydenko.

"Quería ganar otro gran título después del US Open", dijo Rafa, vencedor en tres de los cuatro Grand Slam del año.

"Tengo que disfrutar de este momento. Porque todo podría terminar en cualquier momento", advirtió.

Nadal derrotó en 67 minutos a Monfils, decimoquinto del ranking mundial, que perdió siete de los ocho encuentros con el español. Pese a que el número uno logró sólo un ace frente a los nueve del francés, nunca vio comprometida su victoria y jamás tuvo un break point en contra.

"Estuve muy cómodo y fui capaz de jugar con mucha intensidad. Así es como gané", explicó el nuevo campeón tras su victoria ante 10.000 espectadores en el estadio Ariake de Tokio. Monfils, en cambio, todavía espera ganar su primer título esta temporada.

"Rafael jugó muy sólido. No pude encontrar solución", admitió.

Nadal, que el pasado fin de semana perdió en semifinales en Bangkok frente a su compatriota Guillermo García-López, mejoró su balance este año a 66 victorias y ocho derrotas.

Ea más, sólo perdió una de las ocho finales que disputó en los 15 torneos en los que participó en 2010. Fue a principios de año en Doha ante Davydenko.

A diferencia de años anteriores, el mallorquín parece haber llegado también en buena forma y buen tono físico a la parte final de la temporada. Su último título a estas alturas del curso fue en el torneo indoor de Madrid en 2005. Con su triunfo en Tokio, ya suma 43 títulos en su carrera.