CIPOLLETTI (AC).- Por lo mal que jugó y por haberlo hecho con un hombre menos durante gran parte del partido, el 1-1 que consiguió Cipolletti (11) en La Visera ante Unión de Mar del Plata (9), terminó siendo negocio porque se mantiene único escolta.
El equipo albinegro, que sólo tuvo como punto destacado la actuación del arquero Alan Yorno, no pudo mostrar nada de lo bueno que venía realizando fuera de casa.
Fue un Cipolletti desconcentrado, con poca actitud, impreciso y con nula generación de fútbol.
Las variaciones del partido, sumadas a las convicciones del técnico, hicieron que en el tramo final del partido se viera un equipo desequilibrado, con delanteros jugando en la zona de volantes (Bruno Weisser de 8) y hasta en la defensa (Mario Ávila de 4), aunque llamativamente fue ese tramo el más "emotivo".
Para redondear un primer tiempo olvidable, en que el que Cipolletti no llegó ninguna vez al arco de Unión, y el equipo perdió una y otra vez ante el ordenado aunque poco punzante conjunto marplatense, se fue al descanso con uno menos por la expulsión de Mauro Palomeque.
Para el complemento Marcelo Yorno mandó al chico Gabriel Chironi por Solana, y volvió a armar la línea de cuatro en el fondo con el retroceso de López Carrillo.
El equipo estaba un poco más metido en el partido, aunque tardó 20 minutos más en crear la primera situación clara de gol. Ávila (había ingresado por Inda), cortó en el medio, abrió para Petti, pero el delantero se la entregó débil a las manos del arquero.
Unión no perdonó sobre la media hora cuando Alessandroni definió bien arriba para el 1-0.
El rápido empate de Weisser (de penal) aplacó un poco las críticas.
De ahí hasta el final, Cipolletti intentó pero terminó gobernado por el desorden.