Anoche, en Tucumán, Ariel Ortega volvía a ser titular por segunda vez consecutiva, luego de haber estado fuera del equipo durante casi dos meses, a partir de una decisión tomada por Leonardo Astrada en torno a los problemas del jujeño con el alcohol.

El Burrito jugó un partido apenas discreto durante el primer tiempo. Se mostró siempre como receptor de la pelota para iniciar los ataques "millonarios".

Sin embargo, fue impreciso al momento de asistir a sus compañeros y de a poco se fue cansando.

En la segunda parte, Ortega tuvo dos chances muy claras para abrir el marcador en favor de River. La primera chance el jujeño la tuvo en el minuto 28, por el sector derecho, cuando remató por encima del travesaño. La segunda se vio un minuto más tarde, cuando ingresó por la izquierda y, solo ante Lucas Ischuck, definió demasiado mal tratándose de él.

A diez minutos del final, se acalambró una de sus piernas y tuvo que dejar la cancha.