Vélez no le teme al doble frente Libertadores y Clausura. Su versión "B" lo mantiene en la pelea por el torneo doméstico y ayer dio otra muestra de ello. El equipo de Ricardo Gareca superó sin inconvenientes al cada vez más comprometido Atlético Tucumán. Fue 1-0 en el José Amalfitani.
Con este resultado los velezanos se colocaron a cinco puntos del líder Independiente, mientras que el Decano pena en el fondo de la tabla de los promedios y con pronóstico alarmante para sus pretensiones de permanencia en la categoría.
El experimentado mediocampista Víctor Zapata fue de lo mejor de los Fortineros y de la cancha, por su contribución para el equilibrio y aporte para el juego colectivo. Por su parte, el arquero Lucas Ischuk fue con sus intervenciones, el principal motivo por el que los tucumanos cayeron apenas por un gol.
A Vélez le alcanzó con poco para ponerse en ventaja, porque los tucumanos le entregaron la posesión de la pelota desde el comienzo y fue suficiente con la prolijidad de Zapata, la movilidad de Juan Manuel Martínez, la pegada del uruguayo Pablo Lima y un cabezazo de Marco Torsiglieri para que obtuviera el 1-0 sin siquiera haber pisado el acelerador.
En la segunda parte Atlético salió en procura de la igualdad, pero fue por demás impotente, mientras Vélez se limitó a regular y esperar la oportunidad.
Fue sólo 1-0 pero la diferencia real es enorme, porque Vélez pelea en los dos frentes de este primer semestre del año, al tiempo que Atlético sigue sin hallar remedio para sus males.