Un "hat trick" de Lionel Messi fue suficiente como para que el Barcelona goleara de visitante por 5-0 al Tenerife y se mantuviera como único líder de la Liga española.

Una hora antes, Gonzalo Higuaín encendía la ilusión de un Bernabeu nevado, cuando convertía un golazo para poner arriba Real Madrid, que terminó venciendo 2-0 al Mallorca. El triunfo, que lo ubicaba transitoriamente por encima del Barça, sólo sirvió para seguir estando dos puntos abajo. Los de Guardiola lideran la Liga con 43 puntos, dos más que los del ingeniero Pellegrini

Ayer, el argentino jugó su primer partido de liga en el año (sólo había jugado en la Copa del Rey ante el Sevilla) y se convirtió en el protagonista absoluto del primer triunfo oficial del Barcelona en el 2010, en tres partidos disputados.

El rosarino anotó a los 36, 45 y 75 minutos, decoró una actuación superlativa y, encima alcanzó a David Villa, con 12 tantos, en la cima de los máximos goleadores de la Liga. Carles Puyol y Pedro Rodríguez completaron la goleada del conjunto visitante.

En tanto, el Barcelona logró disipar toda la incertidumbre generada sobre su juego, después de haber empatado contra el Villarreal y perdido contra el Sevilla, en sendos duelos disputados en el Camp Nou.

El entrenador Josep Guardiola apeló a la velocidad y entusiasmo de Bojan Krkic para acompañar a Messi y Thierry Henry en la ofensiva del equipo catalán. Y el técnico acertó en su decisión. El equipo catalán tardó 35 minutos en reaccionar, después de haberse visto sorprendido por un tremendo esfuerzo físico realizado por el Tenerife. Luego resultó imparable.

La intensa nieve que cubrió la ciudad de Madrid fue incapaz de detener la marcha arrolladora de un Real Madrid que derrotó de local por 2-0 al Mallorca, para mantener la distancia de dos puntos con el Barcelona.

De hecho, habían pasado casi 30 años exactamente, de la última vez en la que el Real Madrid disputó un partido en el Santiago Bernabéu bajo nieve: fue el 13 de enero de 1980, cuando derrotó por 3-1 a Las Palmas.

Gonzalo Higuaín abrió la cuenta para los locales con un golazo de zurda convertido a los 7 minutos de juego, mientras que Esteban Granero completó el triunfo, a los cuatro del complemento.

El ex delantero de River llegó a los once goles, uno menos que Messi y Villa, los bombarderos de la Liga.