A poco más de 300 kilómetros del Parque Independencia la fortuna le hizo un guiño a Newell´s: en La Bombonera, Boca vencía a Banfield y volvía a dejar al equipo de Roberto Sensini con el destino en sus manos, pero San Lorenzo salió a jugar, le ganó 2-0, y destruyó las chances del conjunto rosarino.
Los nervios maniataron a Newell´s desde el inicio. Y fue así que a los 8 minutos Bordagaray le robó la pelota a Quiroga, ingresó al área e Insaurralde le cometió penal. Pero segundos más tarde, Peratta le devolvió la vida a los hinchas rojinegros al rechazar el envío anunciado del Kily González, que esta vez no pudo con el rival de toda la vida.
El "Coloso" estalló, pero Newell´s seguía dormido y dos minutos más tarde San Lorenzo lo aprovechó: Bordagaray sacó un disparo "a colocar" que se metió junto al ángulo izquierdo de Peratta. Newell´s se despertó y, con más ganas que orden, empezó a arrinconar al Ciclón.
Newell´s siguió careciendo de orden en la segunda mitad y de a poco San Lorenzo se fue consolidando. No permitió que Newell´s le generara situaciones de riesgo y complicó de contra a una defensa muy mal parada.
Fue así que, tras un nuevo error defensivo, Pintos desbordó por derecha, sacó el centro atrás y Bordagaray volvió a anticipar a Insaurralde para sellar la suerte del equipo "leproso".
A poco del final, el pueblo ñulista empezó a cantar y alentar, a modo de ofrenda al equipo pese a que el título se le terminó de escurrir entre las manos.