Después de quedarse con toda la bronca, Mikko Hirvonen señaló que "el capó fue nuestro último problema, pero en realidad perdimos el rally el sábado al no poder encontrar el ritmo en esos dos tramos. Ahora tengo que volver al trabajo y en el próximo Mundial ser más rápido. Aun así fue mi mejor temporada. Estamos muy cerca de su velocidad y eso sienta bien", señaló.