En el vestuario de Cipolletti se respiraba desahogo. Es que los jugadores sabían que venían con una especie de deuda futbolística y ayer la saldaron con creces.
"Creo que fue el gol más rápido de mi carrera y por suerte sirvió para abrir el partido. Cuando vienen los goles todo se hace más simple", contó Hugo Prieto.
En diálogo con FM Galas, Manolo Berra destacó que "recuperamos nuestro fútbol. Estamos muy contentos porque hicimos un gran sacrificio, pudimos meter los goles en los momentos justos y después controlamos el partido más allá de algún sobresalto. Nos da mucha tranquilidad para volver con alegría y pensar en Madryn".