River y Colón igualaron sin goles en un partido opaco en el que ambos equipos se acercaron poco a los arcos y terminaron aburriendo a la buena cantidad de público que se acercó al Monumental.
Para el equipo de Néstor Gorosito fue otra frustración con las fallas de siempre: areció de ideas y a partir de la escasa participación de Ariel Ortega, no encontró la forma de doblegar a un rival que vino a jugar de contra y no se fue descontento con el empate.
El primer tiempo fue parejo. Las intenciones de ambos equipos no pasaron a mayores, sobre todo por la falta de precisión y claridad de mitad de cancha hacia adelante. Fue Colón el que pretendió ser protagonista y dispuso de las mejores situaciones, pero falló en la puntada final para poder vulnerar al seguro Daniel Vega.
River, superado en la mitad de la cancha, con Matías Almeyda y Diego Barrado, demasiado solos, nunca pudo genera un juego asociado que ponga en riesgo a la defensa sabalera.
A los 22, Ricardo Gómez habilitó a Rivarola, quien remató desde 30 metros exigiendo al arquero rojinegro quien volvió a rechazar al corner.
Sobre el final llegó la más clara de River, cuando Mauro Díaz realizó una gran maniobra: ingresó al área por izquierda, se sacó de encima dos hombres pero cuando estaba por rematar Ariel Garcé se interpuso en su camino.
Pese a mantener las intenciones de la primera etapa, ambos conjuntos no pudieron sacarse ventaja y la disputa en el mediocampo fue una constante en el complemento.
Néstor Gorosito intentó darle velocidad al ataque con el ingreso de Daniel Villalva por Cristian Fabbiani, pero poco pudo aportar a una deslucida ofensiva. Colón, replegado y dispuesto a desbaratar cualquier intento de River, sólo intentó a partir de pelotazos a sus delanteros, Esteban Fuertes y Federico Nieto. El final encontró impotentes a los jugadores "millonarios", que se fueron en medio de un coro de silbidos que refleja la actualidad del equipo de Núñez.