Un trabajo sin fallas en la segunda etapa le permitió al reginense Raúl A. Martínez quedarse con la victoria en una nueva edición del Rally de la Comarca Petrolera, que se disputó por la segunda fecha del regional.

El festejo no fue completo porque Martínez fue excluido del Argentino, donde también había marcado la diferencia en la Súper R.

Un error del equipo lo terminó pagando caro. Le cargaron combustible en el parque de asistencia en lugar del sector reservado por el Argentino.

En el regional la recarga se realiza en la asistencia, por lo que el reginense al menos se salvó en el regional, donde encontró una dura oposición del barilochense Daniel Llanos, al que terminó aventajando por 16s 1/10.

Martínez impuso un ritmo que fue imposible de aguantar para Llanos, quien demostró que con trabajo se le puede pelear al campeón. Fue tercero el neuquino Carlos Valls, quien ganó en el Argentino.

El campeón salió con todo y en el primer tramo le sacó una diferencia a Llanos que le permitió convertirse en el nuevo líder por más de 15 segundos, diferencia que después se mantuvo.

En la tracción simple, el Grupo N-3 y la general quedó para Mauro Debasa, escoltado por el pentacampeón Manuel Machinea.

Uno de los que se lució fue el rinconense Carlos A. Parada, ganador por primera vez en el Grupo N-2 con el Peugeot 206.

Fue intratable en las dos etapas y relegó a Claudio M. Bisanti, el líder del Argentino, nada menos.

En esta división se anotaron muchos, pero apenas dos pudieron completar la exigencia.

En la Clase A-6 repitió victoria el neuquino Oscar Sabas Otta, después de un problema de válvulas en su Siena que igual se bancó las dos etapas.

El líder del certamen aventajó por más de un minuto al reaparecido Roberto Raimondi y a Daniel Mellado, mientras que cuarto recién apareció Darío Hernández, quien se llevó la victoria por el Argentino.

La prueba tuvo una gran exigencia y eso quedó reflejado en que apenas llegaron 16 de los 47 participantes que largaron. Encima, en caminos veloces y complicados por la lluvia del pasado sábado, se registraron algunos vuelcos.

Uno que se pegó fuerte fue Sebastián Martínez, quien casi destruyó su Palio del Grupo N-2, cuando promediaba el tercer tramo de la segunda etapa.

Otro de los que se dio vuelta, sorprendido por el agua en una de las curvas, fue el eterno Jorge Grassano, quien pudo seguir hasta que abandonó cerca del final.

La prueba de la comarca es historia. Ahora, a esperar la tercera. ¿Será finalmente en El Chocón o habrá alguna sorpresa?