El joven se arrodilló ante su gente y festejó a puño apretado. Otra vez daba esa señal de que había conseguido una nueva victoria, su tercera consecutiva. Este TC 2000 que lo tiene como líder volvió a ser testigo del fenómeno José M. López-Honda.
Si bien Leonel Pernía abandonó, fue decisivo para que "Pechito" López y Juan M. Silva escalaran posiciones e hicieran ese "1-2" que caracteriza al equipo Petrobras.
En la prueba clasificatoria ya se veía venir. El equipo que utiliza los Honda largaba 13 con López, 14 con Silva) y 15 con Pernía, pero el tridente comenzó con su ofensiva y Oberá los vio quinto a López, séptimo a Pernía) y octavo a Silva.
El primero fue Guillermo Ortelli, pero el protagonista principal resultó Mariano Werner, quien aguantó durante tres vueltas a todos los Honda, que entre encierros y toquecitos no podían quebrarlo.
Sin embargo, "Pechito" encontró un hueco y quedó en la quinta posición, convirtiéndose en firma candidato para la final.
La largada de la final estuvo llena de imprevistos. Primero, Ortelli, quien tenía la "pole", no salió bien con su Vectra y fue superado hasta caer en el sexto lugar.
Segundo, Emiliano Spataro, quien movía tercero con su Fiat, fue penalizado por largada fallida y debió pasar por boxes.
Y tercero, Pernía, quien había tomado la punta después de lo de Spataro, tuvo un problema en la hidráulica y quedó afuera.
Fue así que López, luego de largar en la quinta posición, se ubicó en la punta y el monólogo de Roca se repitió. Nadiepudo con los Honda, porque Silva estaba segundo y ambos se alejaron y tuvieron la pista limpia para manejar a su antojo la prueba.
El que se vino de atrás fue Norberto Fontana con su Toyota Corolla. Largó noveno y terminó tercero.
Por el lado de los privados, el mejor fue Santiago Ventana, quien terminó séptimo con su Chevrolet Astra.
También fue muy interesante el trabajo que realizaron en la final Fabián Yannantuoni, Ernesto Bessone y Emanuel Moriatis.
La próxima del TC 2000 será en el circuito mendocino de San Martín el 31 de mayo.
"Pechito" es el líder y está ilusionado con "un auto barbaro", como también con un equipo Honda temible, que demuestra su potencial en cada presentación de la renovada categoría.
Habrá que acelerar mucho para darle caza a las liebres blancas y azules.