Nadie había logrado antes en la era abierta del tenis, tantos títulos en el tradicional certamen de Montecarlo, en una prueba más de que el número uno del mundo es el rey del polvo de ladrillo indiscutido.

Rafael Nadal cimentó su leyenda como el más temible jugador sobre arcilla del último tiempo al lograr su quinto título consecutivo en el Principado, imponiéndose en la final a Novak Djokovic por 6-3, 2-6 y 6-1. El serbio tuvo al menos el honor de ganar un set al español, algo que nadie conseguía en Mónaco desde que lo hizo el suizo Roger Federer en la final del 2006.

Nadal sumó su partido número 27 consecutivo ganando en el torneo, donde el español ejerce su hegemonía desde el 2005. "Ganar cinco veces aquí es un sueño para mí", admitió el español aún sobre la cancha. "Montecarlo es uno de mis torneos favoritos. Por historia y porque el lugar es muy bonito".

Djokovic, número tres del mundo, demostró por qué el año pasado se impuso en el otro Masters 1000 sobre arcilla, Roma, que este año estará acompañado además por el nuevo torneo de Madrid, justo una semana antes de que se inicie el Abierto de Roland Garros.

De todas maneras, "Nole" sigue sin ganarle a Nadal en las siete ocasiones en las que jugaron sobre la superficie anaranjada. El serbio tuvo ayer sus opciones, pero "Rafa" ganó los puntos clave al comienzo del set decisivo y desesperó a su rival. Especialista en agarrarse a la cancha cuando las cosas se ponen difíciles, el de Manacor consiguió mantener su servicio en el maratoniano primer juego del tercer set tras 13 minutos, donde levantó las tres oportunidades de quiebre que tuvo Djokovic. Luego rompió el saque de su rival y el serbio bajó los brazos.

Previamente, parecía que se le escapaba a Nadal por la forma que el serbio dominó el segundo set, en el que se lució al ganar todos los puntos cerca de la red y meterle presión al español con su saque.

"Él estaba jugando mejor, pero yo salvé algunas bolas importantes. Para la confianza fue importante. Tuve que luchar todo el tiempo y poner las bolas dentro del campo", dijo Nadal. "Estuve muy concentrado en cada momento. Por eso pude ganar", añadió.

Nadal intentará ahora encadenar también su quinto título en Barcelona, en el torneo Conde de Godó y aspira a lograr lo mismo nada menos que sobre la arcilla de Roland Garros, donde nunca ha perdido. "No nos olvidemos que esto acaba de empezar", advirtió el número uno del mundo, que pese a todo ya es, junto al británico Andy Murray, el jugador con más títulos esta temporada, tras sus victorias en Australia e Indian Wells.