El seleccionado argentino de handbol perdió ayer ante Francia, el último campeón olímpico y candidato al título, por un decoroso 33 a 26, en partido correspondiente a la segunda fecha del grupo A, de la Copa del Mundo, que se juega en el Pabellón Atlético de Grodsik de Ojisek, en Croacia.
El albiceleste jugará hoy a las 12:30 del este argentino ante Rumania, en partido de la tercera fecha y en el que tampoco parte como favorito. Igual, corre con la obligación de ganar porque está 0-2, ya que en el debut había perdido ante Eslovaquia, por 27-25.
En los franceses, el goleador del partido fue Michael Guigou con siete tantos, mientras que los máximos anotadores argentinos fueron Andrés Kogovsek y Damián Migueles, con cinco tantos cada uno.
El equipo conducido por Eduardo Gallardo poco pudo hacer ante un rival superior, aunque cumplió otra muy buena tarea y obligó al actual campeón olímpico a trabajar duro.
Argentina jugó bien, fue muy inteligente para mover la pelota y meditar los ataques para encontrar el momento indicado para no volverse con las manos vacías, y por momentos tuvo a Francia tensionado contra las cuerdas.
Sin embargo, durante ciertos pasajes pagó caro el tratar de prenderse en la vertiginosidad y la velocidad del juego de Francia, que en esos momentos sacó a relucir el nivel de Nikola Karabatic, el mejor jugador del mundo, Luc Abalo y Michael Guigou.
AP