Argentina y Chile están cada vez más cerca de asegurarse la sede de la edición 2010 del Dakar, después de aceptar sus gobiernos las condiciones pedidas por Amaury Sport Organisation (ASO), la empresa dueña de los derechos de la prueba.

"Tenemos posibilidades importantes de retener la prueba. Las conversaciones están avanzadas", comentó el coordinador general del Dakar en Argentina, Leonardo Boto.

El portavoz del gobierno chileno, Francisco Vidal, había revelado días antes que estaba "aprobado" el petitorio de

ASO, el que incluía un aporte de ocho millones de dólares.

El anuncio de la sede del Dakar 2010, que tiene como fecha límite febrero, depende del resultado de gestiones que realizan Egipto, Libia y Túnez por recuperar la prueba para África, ante la imposibilidad de retornar a Mauritania, Senegal y Argelia por las amenazas terroristas.

"Lo estamos analizando. Es imaginable que el Dakar vuelva a países que lo recibieron. Pero no hay nada concreto", aseguró Roger Kalmanovitz, jefe de seguridad y director de relaciones exteriores de la prueba.

La decisión final depende de de que Argentina y Chile se decidan a ayudar a reducir el costo de viaje de los pilotos amateurs a los niveles de lo que demanda viajar a África, última exigencia presentada a los gobiernos por el director del

Dakar, el francés Etienne Lavigne.

Sin embargo, el empresario reconoció que es casi una decisión volver a Sudamérica, en especial por el entusiasmo de los pilotos con las comodidades urbanas, la dureza de la prueba y el fervor del público. "Los paisajes y el fervor de la gente es lo que más gustó", afirmó.

De hecho, más de dos millones de personas siguieron la caravana en su recorrido por montañas, dunas y estepas, situación que deslumbró a los competidores. Sólo en la largada en Buenos Aires hubo 500.000 espectadores.

"Voy a estar en grandes problemas si no volvemos", insistió Lavigne, al recibir a la presidenta chilena, Michelle Bachelet, en el campamento de Valparaíso, gesto que el empresario calificó como decisivo.

Ese mismo día, el portavoz del gobierno chileno, Francisco Vidal, afirmó que el regreso a Sudamérica estaba "aprobado", adelantando incluso un trazado que igualaba el número de etapas en Chile y Argentina.

Pero lo cierto es que aunque la decisión sea confirmada, hay áreas grises que mejorar y enfrentar. Una de ellas es la eficiencia de la seguridad en Argentina.

"Argentina es federal y eso lo hace distinto. Con Chile no tuvimos problemas. La coordinación con carabineros funcionó perfecto", comentó el propio Lavigne.

Los dados parecen jugados, e incluso más allá del 2010, los dirigentes de ASO, aunque no confirmaron aún la realización del Dakar 2010 en Sudamérica, ya dieron una señal decisiva al revelar que evalúan la posibilidad de una alternancia de largo plazo con África.

Lavigne tiene la palabra final acerca de la próxima sede.

"Tato", el salvador allense de Coma

ALLEN (AA) - La prensa internacional se refirió a él una y otra vez. Hasta ahora sólo había sido mencionado como un espectador anónimo que salvó a Marc Coma al regalarle un litro de aceite. "El hombre que le tendió una mano al campeón se llama Roberto, le apodan "Tato" y vive en Allen.

Para el portal de Euro Sport fue "un aceite "milagroso". El sitio de noticias de "La Vanguardia" de España tituló "el espectador que salvó a Coma". En general la prensa toda se refirió al salvataje de la segunda etapa del Dakar, sin el cual Coma no hubiera llegado a Madryn y quizás, tampoco, podría haber logrado la victoria.

El hombre que salvó a Coma se llama Roberto Gugliara y reside en Allen. "Tato" estaba a la vera del camino del Dakar y fiel a su costumbre de conductor precavido, llevaba en su Seat Ibiza un litro de aceite que le prestó al catalán.

"Me encontré con el Dakar en Acha. Estábamos mirando con mi señora y justo enfrente paró este muchacho que no sabíamos ni quién era, con un problema en la moto. Desarmó todo el frente, sacó un estuche con herramientas, empezó a amasar una pasta y tapó el radiador. Me di cuenta de que tenía una fuga de aceite. Entonces no dudé. Fui corriendo a mi auto, busqué el litro de aceite que tenía en mi baúl y se lo di a un muchachito que luego se lo alcanzó al piloto. Coma también pedía desesperado una llave de 6mm. Quise ofrecerle una pequeña llave francesa que también llevaba en mi auto, pero cuando volví ya se iba" comentó "Tato" al explicar cómo socorrió al campeón del Dakar.

Ni bien recibió el aceite salvador, Coma colocó un poco del líquido en la moto y el resto lo guardó dentro de su chaqueta. Puso en marcha el rodado y continuó gracias a "Tato".

"Tato" Gugliara, ex futbolista, lo salvó a Coma con el aceite.