Carlos Sainz anduvo muy rápido en una etapa que se adaptó a su estilo, logró una nueva victoria en el Dakar y se afirmó en la punta de la general, escoltado por sus compañeros de VW. Recién en el cuarto lugar aparece su compatriota Joan "Nani" Roma, con Mitsubishi. Ayer, en el parcial de Valparaíso-La Serena sufrió toda clase de problemas el mendocino Orlando Terranova.

E piloto disfrutó del recorrido que tuvo el especial de ayer que terminó en La Serena. La principal figura del equipo VW, que está monopolizando el Dakar, aprovechó un parcial rápido y lleno de curvas, para revivir sus grandes triunfos en el WRC.

En un recorrido que se ajustaba a sus gustos, no extraño que el "Matador" se quedara con la victoria en la octava etapa, que era de transición y se convirtió de confirmación. Los VW dominaron un especial ideal para su potencia.

El alemán Dietter Depping se metió segundo, a 4m 02s, y el estadounidense Mark Miller fue tercero a 4m 12s. La marca alemana está en su mejor momento, no solo por este triplete, sino porque su cuarto vehículo alcanza la quinta posición, aunque el sudafricano Giniel De Villiers resignara diez minutos en la pelea interna con Sainz.

Por lo tanto, el equipo volvió a cosechar grandes resultados, que solo se ven algo amenazados por la resistencia de "Nani" Roma, con su Mitsubishi Lancer, único representante de la marca japonesa, en cuarta posición, y auténtica

espina que impide el dominio absoluto de la marca alemana.

La clasificación general no sufrió ninguna modificación en sus puestos más destacados. Sainz sumó algunos minutos adicionales, dejando ligeramente más atrás a Roma, cuarto a 33m 31s.

Esta diferencia deja abierta todas las posibilidades en esta pugna que, a menos que cambien mucho las cosas, se libra entre Roma, solo, contra los VW.

La Serena-Copiapó, que se disputará hoy, será la primera etapa de una trilogía decisiva. La reputación del desierto de Atacama, presentado como el más árido del mundo, podrá ser sentida por los participantes.

La etapa lleva la firma del Dakar 2009, con muchos cambios de terreno, sobresaliendo largas porciones de dunas en el final.

El recorrido será de 537 kilómetros, con 88 de enlace y 449 de velocidad, que aparecen como una gran exigencia para los participantes que sobreviven a la dureza de la nueva versión del Dakar.