Tigre le metió presión después de dar vuelta un partido que le era desfavorable con River, pero lejos de amilanarse, Boca sacó pecho, se apoyó en su estandarte, el hombre que lleva la "10" ceñida en la espalda, venció a Racing (2-1) en un clásico jugado con los dientes apretados y se subió a lo más alto de la tabla.
A falta de dos fechas para el final de este apasionante Apertura, y con Gimnasia de La Plata y Colón en su horizonte, el "Xeneize" consiguió un triunfo imprescindible que le permitió sacarle dos puntos a Tigre, cuatro a Lanús y cinco a San Lorenzo, que deberá completar con Huracán. Lo hizo gracias a dos goles de Juan Román Riquelme, el ídolo de todo el pueblo auriazul.
En La Bombonera, el primer tiempo se jugó a ritmo bastante lento porque los dos trataron de cuidar la pelota. Boca fue el que tuvo preferentemente la iniciativa, aunque le costó encontrar profundidad. La primera se la perdió Jesús Dátolo a los 16 y seis después contestó Maxi Moralez con un disparo que fue directo al travesaño de Javier García.
La más clara antes de la apertura fue a los 35, cuando combinaron Figueroa y Viatri, rechazó Migliore, la tomó Riquelme, hizo varias pisadas y la terminó tirando por arriba.
Tres minutos más tarde el "Torero" colocó un gran pase para Figueroa, quien picó y saltó para eludir la salida de Migliore, perdió el equilibrio sin que el arquero lo tocara, pero Pablo Lunati se equivocó y sancionó penal, que Riquelme transformó en gol con preciso derechazo.
La Bombonera era una fiesta y el descanso estaba cerca cuando, a los 45, Moralez eje
cutó un córner desde la derecha, Franco Sosa saltó por encima de todos y de cabeza decretó la igualdad.
En la segunda parte Boca salió decidido en búsqueda de la ofensiva con Riquelme más participativo y con mayor movilidad. Sin embargo fue Racing el que tuvo la primera gran ocasión para desnivelar y fue a los 9, a través de un zurdazo de Claudio Yacob que García desvió al córner.
Al local le costaba elaborar juego en los últimos metros porque Racing se cerraba bien, pero sobre los 14, encontró el desnivel. Dátolo entrando por izquierda remató con derecha, se produjo un rebote, la pelota se elevó y cuando caía Riquelme la conectó con un impecable remate.
Racing buscó la igualdad hasta el final con empuje y determinación basado en un buen trabajo de González, pero le faltaron ideas. En las réplicas Boca pudo haber ampliado ya que tuvo por lo menos tres posibilidades netas, todas ellas a través de Viatri. A los 23 con un derechazo que se desvió en José Shaffer y salió al córner, a los 34 con un disparo que exigió una muy buena respuesta de Migliore luego de un gran pase de Riquelme y a los 35 con un cabezazo alto.
Como en casi todas sus victorias de los últimos tiempos Boca no pudo obtener más de un gol de diferencia, pero el resultado lo deja cerca de la coronación.