Independiente pegó en el momento justo y después soportó con entereza una enorme cantidad de contratiempos, para cosechar su tercera victoria en serie. Fue 1-0 sobre Racing, en Trelew, en un partido lleno de obstáculos, que terminó con un saldo muy positivo. Esto ubica al "Rojo" como escolta de Huracán (CR), que se despegan del resto de los equipos del grupo 2.

La tarde fue redonda en el resultado y se apoyó en una actuación colectiva que no admite puntos flojos. Adrián Kees, el goleador, facturó en la primera que tuvo y eso simplificó el trabajo.

Corría apenas el cuarto de hora y el visitante ya estaba en ventaja. Eso puso muy nervioso a Racing, necesitado de sumar en casa, que una y otra vez equivocó el camino. La defensa "roja" sufrió la baja de Juan Rastellini, que se fue lesionado y eso obligó a rearmar el esquema con el ingreso de Federico Grill. Los jugadores se acomodaron rápido y respondieron bien.

Los chubutenses tuvieron más tiempo la pelota y cada vez que ganaron en profundidad, se encontraron con la buena respuesta de la última línea neuquina y en última instancia con las apariciones de Nico Peralta.

En el complemento, Racing salió a pasarlo por arriba al "Rojo", pero el mediocampo se plantó bien, tomó la marca de los que más saben en el elenco de Carlos Leeb y así controló el vendaval.

Independiente se vio disminuido las expulsiones de Ramos y Sánchez, lo que dejó a la escuadra de Omar Dehais con nueve. Y en menos de diez minutos un penal en contra, la mejor ocasión que dispuso el local para establecer el empate.

Allí se agigantó la figura de Peralta que adivinó las intenciones de Esteban López y detuvo el disparo. Después fue todo aguante por parte de Independiente, que se trajo tres puntos fundamentales de Trelew.