Cada vez que trepa al tapiz, Aldo Ríos sabe a la perfección qué rol debe cumplir. Desde aquella magistral demostración en la FAB, allá por marzo del 2002 ante Rocky Giménez -el cordobés endiablado y noqueador que resignó esa noche su cotizado invicto-, hasta las inolvidables clases de exquisito estilista que regaló con Alberto Sicurella, el “Kojak” Silva y el “Gauchito” Paz, los más taquilleros de la división en la última década. Pero el “Galán” (60,700 kgs) también sabe de guapeza y entrega, y eso sacó a relucir el sábado en el Ruca Che para vencer al marplatense Nazareno Ruiz (60,500) y retener por primera vez el cetro nacional de los ligeros.
El éxito -el número 46 en 51 presentaciones- fue por puntos en fallo unánime: un realista 95-94 (Scorilli) y dos generosos 98-94.5 (Pieri) y 98,5-95.5 (Garayo).
El pleito central de la velada que convocó a poco más de un millar de espectadores, tuvo todos los ingredientes. Por un lado, un Ríos activo, apostando al contragolpe como vía para marcar diferencias y efectivo con el cross.
Por el otro, un rival complejo, que buscó en los cruces el golpe lapidario que nunca llegó, pero que se las arregló en la corta para desequilibrar en más de una oportunidad. Como ocurrió en el cuarto, cuando llegó con un zurdazo abajo que conmovió a Ríos, quien, recién en el sexto, recuperó el aire y comenzó a mandar sobre el ring. 
Para el “Galán” fue una noche especial: se dio gran el gusto de reencontrarse con su  público con una actuación de un elevado nivel técnico y a su vez, demostró que sigue vigente (no conoce la derrota en el país, en 13 años de carrera). Y también dejó en claro que pese a su archirreconocido déficit de potencia en los puños, soñar con una consagración mundialista a esta altura, no es una utopía.
• Billi y otro título: Tiene apenas 10 combates como rentado, pero el menor de los profesionales de la Dinastía Godoy, Billi “El Niño”, ya se dio el gusto de sumar dos títulos internacionales. Al conquistado en Austria en mayo último, le sumó la corona Continental de la Américas del CMB, al vencer claramente por puntos al riojano Pablo Alberto Cortés (71).
La victoria de Billi (72) fue inobjetable y sólo la guapeza de Cortés -que aguantó de pie todo lo que recibió- permitió que la pelea se defina en las tarjetas. Los guarismos fueron: 100-93.5 (Tapia), 100-92 (Dufour) y 100-91.5 (Pedernera).
En la previa, sus hermanos Alberto “Maravilla” (62,400) y Horacio “La Pantera” (60,500), salieron por puntos. El primogénito superó en las tarjetas a Gastón Isasmendi (61,600) por 60-56.5, 59.5-56.5 y 59.5-57; mientras que Horacio tuvo que esforzarse para hacer lo propio ante Julio César Ruiz (61,200),  por 59.5-56.5 y las dos restantes por 59-57.5.