No convenció demasiado Boca. Ni en la noche del sábado, cuando sumó su segundo empate en un gol, esta vez ante Dorados de Culiacán. Ni en toda la gira mexicana, que incluyó además otro 1-1, ante Tecos de Guadalajara.

Jugados poco menos que a media máquina, los dos amistosos disputados en tierras mexicanas, tras los trabajos físicos en Washington. No mucho habrá sacado Carlos Ischia, de cara ya a la competencia oficial que para Boca se inicia el 10 de agosto, cuando por la primera fecha del torneo Apertura, reciba a Gimnasia de Jujuy. Apenas el hecho de que los jugadores "xeneizes" hayan tenido contacto con la pelota. Demasiado poco.

El sábado, ante Dorados, el conjunto de Ischia arrancó mostrando su superioridad técnica frente a un equipo de la segunda división mexicana, y logró ponerse en ventaja, aunque luego su displicencia lo llevó a retrasarse y dejar huecos en defensa que les permitieron a los de Culiacán encontrar el empate. Pero, tras el 1-1, se quedó con el partido por penales.

Sólo un tibio remate de Héctor Acuña le había dado trabajo a Mauricio Caranta cuando, a los 23 minutos, Cristian Chávez se escapó por derecha y habilitó a Lucas Castromán, quien definió un un tiro a la derecha del arquero Arias. Hacía 500 días que Castromán no convertía. Pero después Boca no llegó más.

La segunda mitad siguió con la misma tónica. Los ingresos de Juan Forlín, Facundo Roncaglia, Neri Cardozo y Ricardo Noir no ayudaron demasiado. Los laterales no subían y nadie aportaba ideas. Noir tuvo un par de

Los tiros desde los doce pasos, finalmente, le dieron xeneize el triunfo: convirtieron Leandro Gracián, Fabián Vargas, Lucas Viatri, Nicolás Gaitán, Gabriel Paletta y Noir, y Arias le tapó el tiro a Ibarra.

El plantel boquense regresaba anoche a Buenos Aires, hoy tendrán el día libre y mañana volverán a las prácticas, ya en la recta final de la pretemporada.