El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, reveló ayer que tiene un "plan B" para el caso de que Sudáfrica falle y no pueda cumplir como organizadora del Mundial del 2010.
"Debería producirse un terremoto para que el Mundial no se lleve a cabo en Sudáfrica, pero yo sería un presidente de la FIFA irresponsable si no contara con un 'plan B'", dijo el titular del ente mundial.
La seguridad en Sudáfrica, país asolado por una alta tasa de criminalidad, es el tema que más preocupa a las autoridades de la FIFA. "La seguridad es cuestión del Estado. Eso no lo puede hacer ninguna organización deportiva. Y en Sudáfrica deberemos colocar nuevamente estándares más exigentes que por ejemplo en la Eurocopa en Austria y Suiza", aseguró Blatter, quién además confirmó que luego de la Copa de las Confederaciones del año próximo, se ratificará o no la sede de Sudáfrica.