Sufrió hasta el final, pero el Inter de Milán logró ayer en la última fecha su tercer título consecutivo de la Liga italiana al derrotar por 2-0 al Parma con goles del atacante sueco Zlatan Ibrahimovic. La Roma, que no pudo pasar del empate 1-1 en Catania, tuvo que conformarse con el segundo puesto. El punto, sin embargo, sirvió a su rival de ayer para eludir un descenso al que se vieron condenados el Parma y el Empoli.
El Inter tuvo que esperar hasta la última fecha para levantar los brazos, después de ver reducida de diez a un punto su ventaja en apenas unas semanas. Ayer, fueron titulares Javier Zanetti y Julio Cruz. En cambio Nicolás Burdisso y Hernán Crespo fueron suplentes.
Hace tres años, aseguraban los críticos, al Inter le regalaron el título por la descalificación de la Juve por su implicación en el escándalo de manipulación de partidos. El año pasado, continuaban, los milaneses sólo fueron campeones porque la Juve estuvo en Serie B y el Milan empezó con puntos de menos por sanción. Esta temporada, sin embargo, los rivales no tienen excusa.
El Inter sumó 85 puntos, tres más que su perseguidor, la Roma, que ni siquiera pudo ganar para, al menos, inquietar al campeón. El gran perdedor fue el Milan, que vio cómo la Fiorentina se quedaba con el cuarto lugar, el último que da acceso a la Liga de Campeones, tras ganar 1-0 al Torino. Los milanistas vencieron 4-1 al Udinese, pero tendrán que jugar la Copa UEFA.