Imposible resistir a la tentación de ver en acción a los mejores pilotos de Argentina y a los equipos más sofisticasos de Sudamérica. El TC 2000 se transformó desde hace años en una de las categorías "top", reconocida incluso a nivel internacional. Desde hoy y hasta el domingo, otra vez hace base en el autódromo roquense, para cumplir la tercera fecha del certamen.

Será la vigésimo quinta presentación en Roca de la categoría, por lo que esta prueba se convirtió en un clásico y ganarla, tanto para los pilotos como para los equipos, tiene un sabor diferente.

El TC 2000 llega a Roca en un momento bárbaro. Hay un plantel de pilotos calificados, donde sobresalen las figuras de los últimos años, pero los que llegaron de afuera ya se ganaron un lugar, por caso José M. López y Ricardo Risatti.

Precisamente, "Pechito" y "Caito" fueron las dos últimas ilusiones argentinas para llegar a la Fórmula 1.

En menos de un año de diferencia, a los dos se les vino abajo el proyecto y mucho antes de lo imaginado regresaron al automovilismo argentino. El TC 2000 agradecido, porque sumó a dos talentos enorme, realmente un desperdicio que estén acá y no en Europa.

Pero los dos se amoldaron rápido a manejar estos autos y hoy pelean de igual a igual con Guillermo Ortelli, el bicampeón Matías Rossi, Martín Basso, Gabriel Ponce de León, Christian Ledesma o Juan M. Silva.

¿Y Norberto Fontana? Otro gran piloto, que no se olvidó de manejar, pero su auto en los últimos tiempos no rindió como el "Gigante" esperaba y necesitaba para estar prendido en la conversación.

Mucho se puede hablar del TC 2000, una categoría que sufrió una gran transformación, y para bien, desde que asumió la presidencia Pablo I. Peón.

Bajo su gestión, se terminaron de afirmar las marcas, se evolucionó en los autos, en la seguridad y la categoría empezó a cruzar las fronteras. Primero, fue Brasil, ahora Uruguay.

En el medio, otros proyectos que aparecían como irrealizables, pero no solo se cumplieron, sino que se mantienen en el certamen, como los 200 Kilómetros de Buenos Aires o la vuelta a los callejeros, por caso Santa Fe, donde el éxito de público sorprendió a propios y extraños, lo mismo que en Punta del Este.

En Roca los aficionados de la patagonia tendrán una oportunidad única, porque podrán disfrutar del TC 2000 en vivo y directo.