Racing tuvo que esperar diez partidos para saber lo que es ganar. Ayer venció 1-0 a Arsenal y por primera vez en lo que va del torno Clausura pudo sumar de a tres. Y el de ayer no fue un día cualquiera para la “Academia”, fue el del estreno de Juan Manuel Llop como su entrenador, y no pudo haberlo hecho mejor. Un golazo de Franco Sosa, un tiro libre perfecto quebró una racha negra que parecía no tener fin.
En unos primeros cuarenta y cinco sumamente discretos, Racing quizá haya realizado su mejor actuación de los últimos tiempos. El equipo dirigido por Llop fue el absoluto dominador, a partir de la correcta tenencia de la pelota y la buena labor de Maximiliano Moralez.
Cuando Racing logró imponer su propuesta fue al ataque y utilizó para llegar los costados de la cancha, especialmente el derecho con Franco Sosa y José Chatruc. Pero a este Racing que vive en la incertidumbre, no sólo le faltó justeza en los metros finales, sino que también se topó con una firme defensa de Arsenal.
Los primeros pasajes del complemento resultaron muy parejos porque Racing se dejó estar, y Arsenal, aunque sin demasiada claridad a la hora de atacar, fue adelante y comenzó a complicarlo. Sin embargo, a los 17 minutos, Hernán Pellerano le cometió foul a Adrián Bastía al borde del área y Sosa, con un perfecto remate, envió la pelota al fondo de la red. El gol no sólo desató la alegría de la gente de Racing, sino que también se ajustaba más a la realidad del partido.
Con el último pitazo de Javier Collado se desató la alegría en el estadio. En las tribunas con los hinchas, y en el campo con los jugadores y cuerpo técnico, que armaron una montaña humana, para festejar un triunfo que parecía no llegar nunca.

“Por el buen camino”

Juan Manuel Llop celebró casi a la par de los jugadores la primera victoria albiceleste en el torneo Clausura. Luego habló: “Se dio lo que necesitaba este grupo desde lo emocional, pero además es un triunfo que nos capitaliza para el futuro. Faltan nueve encuentros y cada uno de ellos tendrá una importancia vital para Racing, pero vamos por buen camino”.
“Yo viví los noventa minutos intensamente. Hubo cosas grandes que se transmitieron del campo de juego a la tribuna, y poder generar una reacción como esa en la gente es una sensación muy especial”. “Si bien ganamos siendo superiores, nos faltó tranquilidad, pero es difícil tenerla después de casi diez fechas sin triunfos”, opinó.