San Lorenzo explotó todas las facilidades que se le ofrecieron para concretar como visitante de Tigre un 5-1 que prolonga su buena racha y vuelve a ubicarlo en los puestos de vanguardia del torneo Clausura.

Tigre controló por largos pasajes el juego durante el primer tiempo, pero su debilidad en la posición defensiva lo condenó a un marcador catastrófico para el cual pesó también su inferioridad numérica, ya que sufrió la expulsión de Martín Galmarini a los 39 minutos de la etapa inicial.

En los 10 primeros minutos San Lorenzo sacó dos goles de ventaja sin haber tenido nunca un plan de juego. Iban 3 minutos cuando Menseguez avanzó por el medio y antes de llegar al área sacó un derechazo bien dirigido al ángulo superior izquierdo que se transformó en gol gracias al adelantamiento de Daniel Islas. Sobre los 10, Orión sacó largo desde su arco, peinó Bilos, alargó Andrés Silvera, falló Blengio y Menseguez aumento la ventaja.

El mayor problema del local fue su debilidad en el fondo. Pudo haber descontado Galmarini, mano a mano con Orión, pero remató desviado. Néstor Ayala cabeceó apenas alto. El descuento llegó a los 28, por intermedio de Giménez .

Cuatro minutos más tarde, la jugada se trasladó de área: Menseguez picó en busca de un pelotazo largo, Galmarini lo golpeó en la cara al intentar ganar la posición y Rafael Furchi sancionó penal y decidió la expulsión del volante de Tigre. El paraguayo Aureliano Torres ejecutó y estiró el marcador 3-1.

En el comienzo del segundo período, antes de los dos minutos, llegó el cuarto gol, en una jugada igual a la del segundo: Méndez rechazó muy exigido desde su área, la pelota picó en el campo, Damián Leyes cabeceó defectuosamente hacia atrás y de nuevo Menseguez, implacable, para vencer a Islas.

Con el partido resuelto, llegó el quinto tanto, en una acción que comenzó con una muy buena salida de Méndez desde el fondo, se prolongó con un pase corto para Silvera, quien cambió de derecha a izquierda por donde apareció solo Bilos para consumar la goleada.