RAÚL BERNAL
rbernal@rionegro.com.ar
Participar de una prueba mundialista siempre es una experiencia cautivante. Mucho más si se trata del legendario Rally de la República Argentina. Si bien cada vez son menos los regionales que se le animan a esta auténtica aventura, nuevamente Nicolás Madero, Alejandro Cancio y Manuel Machinea están esperando el momento de ser protagonista de la gran fiesta que se vivirá en las serranías cordobesas.
Los integrantes de la "armada regional" tienen expectativas diferentes, aunque si en algo coinciden es que dar la vuelta y participar de la premiación final es tan importante como un triunfo.
Madero, de buenos resultados parciales en sus anteriores mundiales, como Cancio, quien nunca tuvo suerte en sus experiencias pasadas, se le animaron a la competitiva PWR, que en Argentina no es otro que el denominado Grupo N-4.
Mientras, Machinea irá por su segunda victoria seguida en la general de la tracción simple, donde sólo habrán ocho participantes. Es más, si el tricampeón regional se conformara con poco, con sólo dar la vuelta ganó en el N-3, porque es el único que se anotó. Su desafío pasa por intentar vencer a los autos del grupo A, que tienen la misma cilindrada que su Peugeot 206.
Madero y Cancio en esta 28 edición hasta coinciden en el mismo equipo, el Tango Rally Team, donde el barilochense desembarcó este año después de estar junto a Federico Villagra. El de Plaza
Huincul hace rato que es integrante de la escudería que lideran Marcos Ligato y David Nalbandian.
Madero, en las dos ediciones anteriores, llegó a arañar las posiciones de privilegio. Tuvo parciales más que interesantes y sólo le faltó suerte para estar subir al podio.
"Es un desafío cautivante participar, más aún en un lugar como Córdoba, donde la gente vive el rally de una forma increíble y saben quien anda rápido, el que viene despacio o los que tienen problemas", aseguró Madero, quien no lo comenta pero se ilusiona con dar una sorpresa.
Cancio nunca tuvo suerte en el Mundial, por lo que buscará cambiar la racha en la clásica carrera cordobesa. "El auto cambió muchísimo, si logramos que tenga confiabilidad, seguro que voy a cumplir un buen papel. Conozco bastante los caminos, me gustan los tramos largos del Mundial. Lo importante es estar prendido desde el principio", aseguró el "petrolero".
Machinea siempre cultiva el perfil bajo, reconoce que le encanta participar de la prueba por su entorno y lo que representa para los aficionados, pero también tiene ganas de demostrar otra vez que se pueden cumplir los más de 20 tramos especiales que tendrá el desafío.
"Apuesto a la confiabilidad del auto que me entregan Oscar Millán y su hijo. No tengo por qué hacerme el piloto, hay que llevar el auto por el medio y evitando las piedras. No se imaginan cómo quedan los pisos después del paso de los WRC y los del N-4. Hay que ir por la huella, esquivando todo", afirmó Machinea.
Tres pilotos lideran la "armada regional". Tres ilusiones. Tres motivos para que los numerosos aficionados de Río Negro y Neuquén tengan un bonus track para presenciar este clásico del rally mundial que comenzará el jueves.