El arranque del Torneo del Interior fue bueno para los visitantes. Y el dato es elocuente: de los nueve partidos que involucraron a los regionales, cinco quedaron en manos de los que salieron fuera de casa.
Por el grupo 42, Independiente de Río Colorado pegó a domicilio al vencer a Buena Parada y quedar como único líder, ya que Rosario Puerto Belgrano y Libertad de Bahía Blanca igualaron en uno. El “Rojo”golpeó de entrada por intermedio de Lucas Millán, y en el despertar del segundo tiempo aumentó mediante Giuliano Benítez, la figura del encuentro. El “fortinero” descontó a los 30 por intermedio de Pablo Albarracín, pero no le alcanzó.
En la zona 63 se vivieron los partidos más emotivos de la jornada. En Centenario, Petrolero Argentino obtuvo los tres puntos a cuatro minuto del final y debutó ganando de visitante, 3 a 2, frente a un Pacífico que hizo un buen juego. El “decano” comenzó arriba con un gol de Nicolás Paponi, a los 10 del inicio, y así se fueron al descanso.
A la vuelta de los vestuarios, los “petroleros” empataron por intermedio de Juan Valenzuela y se pusieron arriba con gol de Gustavo Vergara. El empate de los capitalinos fue de Paponi, pero sobre el epílogo Sambueza le dio la alegría a Petrolero.
En este grupo también pegó de entrada Deportivo Angostura, que derrotó a Tres de Mayo de Bariloche por 4-3. En el Municipal de Bariloche, el ganador tenía el partido en sus manos ya que a falta de 12 minutos ganaba 4 a 1. Claro, se relajó y en el cierre terminó sufriendo.
El batacazo cayó en la zona 64, ya que el candidato Alianza cayó a los pies de la “cenicienta” Bicicross. Fue un cotejo parejo y mal jugado en los primeros 45, pero el desnivel llegó en el segundo. A los 26 pegó Juan Míguez con un zapatazo bárbaro y sobre los 34 Héctor Ramos puso el 2-0 definitivo. El “Gallito” fue una sobra en Senillosa e incluso, por lo visto en el complemento, la sacó realmente barata.
Otro que arrancó con el pie derecho fue Fernández Oro, que venció a Independiente de Bariloche por 2 a 0 (en la cancha de Unión de Allen) gracias al hambre goleador de Julio Dantas, que hizo doblete.
Centenario es puntero en la 65, ya que venció a Círculo Italiano en Villa Regina, por 3 a 1. El equipo de “Pelusa” Barrios tuvo como figura a Adrián Kees, que marcó por duplicado. Por el mismo grupo, Los Menucos le asestó un mazazo a Independiente de San Antonio al derrotarlo a domicilio por 3-0. La figura de la cancha fue el pibe Diego Lencina, que hizo dos goles. El tercero cayó desde los pies de Eduardo Güichaque.
En la zona 66 el único puntero es Sportman, que venció también de visitante a Deportivo Beltrán, 2-1. Este fue otro de los cotejos que se definió cuando el tiempo expiraba. Ganaba Sportman con tanto de Julio Colguán y empató, ya en el segundo tiempo, Francisco Peguenche. Parecía que el juego acababa en tablas, pero a dos del final Gastón Aguilera le dio la victoria a los de Choele Choel. En el otro juego, Patagones y San Lorenzo aburrieron en un pálido 0-0.
Buena respuesta del público
Seguramente a muchos dirigentes se les habrá dibujado una enorme sonrisa cuando fueron a contar el dinero en las boleterías.
Es que en esta primera fecha del Torneo del Interior el público respondió y en algunas canchas se vivió un muy buen “clima”, el folclore del fútbol que tanto se extrañaba.
Si de concurrencia se trata, en Senillosa se llegó a la máxima marca. En la cancha de Bicicross las tribunas estuvieron a pleno ya que asistieron no menos de 1000 personas.
Más de la mitad gozó con el triunfo del equipo de Casarosa, que metió el batacazo de la jornada; el resto tuvo que aguantar la derrota de Alianza, un equipo que ayer mostró muy poco de todo lo que prometía.
En el entretiempo, cuando el cotejo aún estaba 0-0, volaron algunas piedras de una tribuna a otra, pero la situación se controló rápido.
En las demás canchas de la región no hubieron menos de 450 personas, salvo en Centenario y en Regina, paradójicamente en los estadios donde se especulaba, en la previa, que se vestirían con un buen marco.
En Beltrán unas 600 almas vibraron con un partidazo que se definió cuando el reloj marcaba 43 del segundo. En Patagones, medio millar se aburrió de lo lindo. Todo sea por el fútbol.
