La noche era ideal para el show de los Godoy Boys, pero la alegría no pudo ser completa. Billi "el Niño", Alberto "Maravilla" y los pequeños Gino y Muro, cumplieron con creces cuando treparon al tapiz; pero Horacio "La Pantera" tropezó feo con Jeremías Castillo.Billi (74,250 kgs) demostró que fue un acierto instalarse en Austria -en busca de su proyección internacional-. Mostró una madurez increíble y en tres capítulos noqueó al sampedrino Lucas Molina (74,950).
El más chico de los rentados de la dinastía dominó sin complicaciones y comenzó a definirlo en el primero, cuando envió a la lona a su rival. En el segundo continuó con su clara superioridad y en el definitivo, desplegó toda su artillería. Luego festejó como loco, trepado a los brazos de papá Bruno.
A continuación fue el turno de Alberto (64,100), quien venía en ascenso y tampoco defraudó. "Maravilla" también lo definió por la vía rápida, al noquear en el cuarto asalto a Fabián Martínez (63,500), un rival complicado y desprolijo.
El púgil de Saladillo se adueñó de los dos primeros, ante un centenariense que no lograba soltarse. Durante ese lapso, el visitante conectó los mejores golpes y desorientó al mayor de los Godoy. Pero a partir del tercero se cansó, Alberto aprovechó su mejor condición física y en el cuarto, un "cortito" al hígado desparramó al bonaerense por toda la cuenta.
"Maravilla" sumó así su segundo triunfo consecutivo -venía de ganarle al experimentado Víctor Hugo Paz- y quedó con un palmarés de 21 triunfos (8 antes del límite), un empate y 10 caídas.
La frustración llegó en la previa al gran choque estelar entre Ríos-Alzugaray (ver pág. 16). Horacio (59,900) subió como una tromba, con la idea de definirlo en los primeros minutos, pero los planes no salieron como estaban previstos.
"La Pantera" fue amplio dominador en todo el desarrollo del primero y hasta tuvo al borde del nocaut a Castillo (59,300), quien recibió la cuenta al finalizar el capítulo. Un soberbio cross de derecha al mentón, dejó al de Avellaneda colgando de las sogas.
Pero Horacio cometió el error de no liquidarlo apenas co
menzó el segundo y en un cruce, Castillo lo conectó con justeza en el mentón. Allí se desmoronó la ilusión: "La Pantera" comenzó a deambular sin sentido por el cuadrilátero, sin reacción, hasta que el árbitro neuquino Daniel Rodríguez se apiadó y decretó el nocaut técnico.
Por su parte, los pequeños amateur Gino y Mauro Maximiliano se dieron el gusto de sumarse a la fiesta y triunfaron, ambos por puntos, en las preliminares.