Uno de los puntos más altos de torneo fue la muy buena predisposición de los tenistas para jugar y a la vez desplegar sobre la cancha sus mejores virtudes tenísticas. Se trataba de una exhibición, pero aún así hubo buen juego sobre la cancha 2 del Deportivo Roca.A pesar del calor y el viento que, si bien fue muy leve, alcanzó para levantar más de una vez buena cantidad de polvo de ladrillo, tanto Sergio Roitman como Martín Vasallo Argüello se entregaron al espectáculo que el público fue a ver.
Bromas internas entre ambos dichas en voz alta arrancaron más de una carcajada entre los aficionados. También gestos y algún que otro intercambio de palabras con la gente, cargadas de mucho humor.
Incluso, los inconvenientes provocados por el viento y cierta distracción de las promotoras que desconcentraban a los tenistas, fueron motivos de más chistes.
Pero no todo fue distención para ellos. También jugaron al tenis, y lo hicieron muy bien, con seriedad. En definitiva, otro gesto de respeto para con el público y los organizadores, que fue devuelto con aplausos.
Al final, ambos tenistas, junto con Juan Pablo Guzmán y su tocayo, Brzezicki, se entregaron a las fotos, los autógrafos y los saludos, a pura sonrisa y buena onda.
Cuando caía la tarde, los organizadores destacaban la predisposición de los jugadores para con el público y el juego. Y los jugadores les dieron la razón. (AR)