BAHÍA BLANCA (AN).- Hay una certeza: en esta ciudad habrá mucha gente que soñará con Gabriel Cella Ruggeri. El delantero tuvo una tarde sensacional, le convirtió nada menos que tres goles a Bella Vista y gracias a él Independiente consiguió su segundo triunfo al hilo.
El 3-1 final quizá no reflejó lo que sucedió en gran parte del partido. Porque en los primeros 45 minutos el local fue superior al "Rojo" y no se fue al descanso arriba en el marcador por la buena tarea de Nicolás Peralta.
La dupla Landeiro-Dehais plantó un clásico 4-4-2, apelando a la velocidad de Nicolás Finessi y el poder aéreo de Cella Ruggeri. Claro, los bahienses estaban mejor parados en el medio y tenía un mejor control de balón. Sobre la media hora Maximiliano Vallejos perdió con Peralta y unos minutos después Fabián Vogel definió mal. Instantes más tarde el '1' neuquino se lució otra vez ante Vallejos.
Las emociones grandes se reservaron para el complemento. Apenas iban dos minutos cuando Vallejos puso el 1-0. Y Vallejos sería otra vez protagonista, porque a los 18 se ganó la roja de manera infantil.
El partido cambió, y aparecería el hombre de la tarde. Cella Ruggeri, en la primera que recibió en el epílogo, a los 27, ensayó una media vuelta y la clavó en un ángulo.
De ahí en más serían todas amarguras para Para Bella: a los 29 fue beneficiado con un penal dudoso (de Sablich a Priore) que erró Wilson y unos minutos después Cella Ruggeri aparecería para transformarse en su peor pesadilla: primero, al aprovechar un mal rebote de Elizondo, después con un toque sutil de zurda.
