Emiliano Spataro esperó un año su revancha. En Balcarce, en el cierre del pasado certamen se quedó con las manos vacías por un exceso de Marcos Di Palma, quien le arruinó la consagración al piloto que representa a Racing Club. Ahora, en Roca, la conquista del título para nada tranquila y recién pudo festejar cuando le bajaron la bandera a cuadros.
Spataro fue un canto a la felicidad, que primero se subió a festejar arriba del techo de su Passat y después de confundió en abrazos interminables con los integrantes de su equipo.
"Fue terrible" y "se sufrió mucho", fueron las primeras definiciones del talentoso piloto del Oro Racing, quien se convirtió en el heredero del título que dejó Omar Martínez.
"La definición fue terrible, la verdad que sufrí un montón. En un momento me informan por radio que Diego (por Aventín) estaba 24 y al rato me gritan que estaba sexto, no lo podía creer. Fue bravo, aceleré y pude pasar al 'Bocha' (por Ciantini) y luego a Juan Cruz (Álvarez)", recordó un exultante Spataro, quien no paró de festejar con sus mecánicos y enfundado con su buzo que tiene los colores de Racing Club.
Para poder charlar con el nuevo campeón fue necesario armarse de paciencia. Primero, porque la exclusividad era de la televisión. Después, porque siempre hay algún control que desconoce las credenciales y mientras entorpece el trabajo de los periodistas deja pasar sin problemas a unos cuantos curiosos, hasta que al final apareció Spataro y con la alegría que tenía no le importó demorar unos minutos más para llegar hasta su equipo, donde festejó en la intimidad previo corte de pelo por parte de uno de sus mecánicos.
-¿Cuánto te avisaron que el "Pumita" estaba en los puntos, qué te pasó por la cabeza?
-A partir de ese momento comencé a cometer errores porque el auto se ponía de costado, la pista estaba muy difícil para arriesgar, por suerte las cosas salieron bien.
-¿El título es una revancha por lo de Balcarce del año anterior?
-Este título lo esperé mucho, fueron tres años de ansiedad y de sumar muchas amarguras como la del año anterior cuando Marcos se equivocó muy feo. Acá está el título, cuenta saldada.
-¿Las últimas vueltas cómo fueron?
-Hasta el final no sabía si era campeón, no tenía referencias de Aventín. Cuando me avisan que Diego me superaba en puntos, me pidieron que acelerara todo, que me jugara el resto y eso fue lo que hice. Fue una prueba muy complicada, había mucha tierra en la pista.
-¿Esta vez, los rivales se portaron bien?
-Como señores. Le quiero agradecer a Ciantini porque me respetó, incluso levantó un poco cuando mi auto se iba en los frenajes. Se portó muy bien.
-¿Y el pelo, una promesa?
-Sí. Se la hice a la gente de la categoría y cumplí. ¿Me queda feo? Voy a verme en el espejo y a buscar una peluca hasta que crezca algo.