Javier Moreiro quedó a un paso de la hazaña, pero lo hizo en pista fue realmente bueno. Avanzó hasta donde se lo permitió su auto, que en el autódromo roquense no tuvo precisamente el mejor rendimiento. Fue segundo en el cierre del certamen del TR Junior, donde ganó Gonzalo Perlo y se consagró como primer campeón Federico Bathiche.
En la pista ganó Luis Gautier, pero un recargo por adelantarse en la largada le dio el triunfo a Perlo, a quien igual no le alcanzó para sacarle el título a Bathiche, el único de los tres que llegaron a la definición con posibilidades que tuvo margen para especular.
Las últimas vueltas fueron muy emotivas. Perlo intentó andar rápido con Gautier, buscando que el peruano se metiera a pesar del recargo adelante de Bathiche.
Moreiro aceleró hasta donde el auto se lo permitió buscando superar a Perlo, con lo cual le hubiera sobrado para ser campeón por más que Bathiche quedara tercero.
La largada fue decisiva. Gautier le manoteó el primer lugar a Perlo, a pesar que después sería penalizado. Mientras, Moreiro dio cuenta de Bathiche y se afirmó en el tercer lugar.
Adelante, fueron todos tanteos, pero no hubo sobrepasos. Atrás, los regionales dieron espectáculo.
Federico Carabetta avanzó unas posiciones y terminó en la zona de los puntos importantes, mientras que Alberto Pérez Nonnenmacher, con maniobras de sello propio, se metió entre los diez hasta que en la última vuelta su auto se quedó sin gomas, perdiendo varios pues-tos, aunque demostró que no se olvidó de manejar.
Fueron pasando las vueltas y los que peleaban el título se mantenían en las posiciones. Perlo no podía con Gautier y Moreiro tampoco le sobraba nada para irlos a buscar, a pesar que necesitaba ganar. ¿Bathiche? Tranquilo y por el medio, con resto por si había alguna sorpresa.
Hubo despistes, pero nunca hubo necesidad que ingresara el auto de seguridad, por lo que ni siquiera esa posibilidad tuvo Moreiro para intentar la hazaña en las últimas vueltas.
"Hice lo que pude. En las vueltas previas lo toqué a Ba-thiche, traté que fuera por lo sucio y ponerlo nervioso. Largué bien, lo pasé sin problemas, pero no tuve forma de llegar a la punta", comentó Moreiro entre lágrimas, cuando el título había quedado como un recuerdo.
A pesar que no pudo conquistar el título, Moreiro cerró un año brillante, primero por-que llevó al flamante equipo Patagonia Racing a un lugar de privilegio en la categoría y segundo demostró su vi
gencia como piloto, nada menos.
La categoría cerró su primera temporada con un balance muy positivo. Autos parejos, que salvo cuando se golpean, no se paran. Un futuro muy auspicioso, porque está confirmado que habrá un "refuerzo" importante de pilotos.
El TR Junior todavía maneja precios lógicos.
