Perú y Brasil empataron 1-1, un resultado que a su manera dejó satisfechas a las dos partes. Kaká abrió la cuenta para los dirigidos por Dunga, a los 40 minutos, pero Juan Vargas igualó a los 26 de la segunda parte, en un partido parejo y de dominio alterno que terminó con un enorme susto para los locales, pues un cabezazo de Juan chocó en el palo en el minuto 48.
Los dos equipos se dedicaron a tocar sin profundidad y tuvieron que pasar 33 minutos antes de que llegara la primera jugada de riesgo: un disparo de Vagner Love que se desvió por poco.
Uno por lado
Los pentacampeones empezaron a ejercer un ligero dominio en un partido parejo. Hasta que apareció Kaká. Perú intentó una salida rápida, pero Maicon recortó y se la puso al genio del Milan, quien desde 30 metros y libre de marca sacó un disparo que dejó quieto a Penny.
Los locales trataron de reaccionar y a Claudio Pizarro se le escapó por poco un cabezazo, pero lo que casi llega antes del descanso fue el segundo gol brasileño, gracias a un nuevo tiro de Kaká que el arquero logró desviar con gran esfuerzo.
Perú comenzó el segundo tiempo con malas noticias, pues Paolo Guerrero se quedó en el vestuario por molestias físicas. Los pe
ruanos trataron de tomar la manija del partido, pero sus defectos en la entrega y las rápidas reacciones brasileñas les impidieron crear peligro de gol.
El esfuerzo del Perú tuvo sin embargo su premio con el empate. Un rechazo de cabeza encontró bien ubicado a Vargas, quien sacó un zurdazo que chocó en Lucio y dejó sin opción al arquero Julio César.
Perú fue más insistente en la búsqueda del triunfo en la parte final, mientras los visitantes daban muestras de cansancio.
