Justine Henin resumió en las 3:25 horas que duró la maratónica final del Masters de Madrid la lucha de toda la temporada 2007: sufrió al principio, renació y festejó un título que refrenda su condición de reina del tenis mundial.
La belga derrotó a Maria Sharapova por 5-7, 7-5 y 6-3 en un partido cargado de igualdad y de tensión que hizo las delicias de la afición de Madrid, que se despidió hasta 2009 del tenis femenino tras dos años de asistir a la batalla entre las "maestras" de la raqueta.
Y por segundo año seguido Henin, la número uno, se llevó el triunfo, lo que supone el décimo título de 2007, dos de ellos de Grand Slam -Roland Garros y US Open-. Nada hacía pensar que la belga, que comenzó el año con un traumático divorcio de su marido y su ausencia del Abierto de Australia, culminaría su mejor temporada como profesional.
"Es un sueño lo que pasó esta temporada por los problemas que tuve y sobre todo, lo más importante es que he disfrutado de mi juego", dijo la campeona.
Pero ayer no se le vio disfrutar mucho en la cancha morada y verde del Madrid Arena, apoyada por la mirada constante de su técnico, el argentino Carlos Rodríguez, y por su fiel hinchada.
Justine, de 25 años, apeló a su resistencia y a su fuerza mental para llevarse un partido muy parejo en el que sufrió mucho con su servicio. Ambas mantuvieron su saque en el inicio y así se llegó hasta el 6-5 a favor de la rusa, más sólida que su rival al saque. Claro que dejó pasar siete pelotas de set, hasta que concretó la victoria parcial.
En el primer juego del segundo la belga tuvo chance de quebrar, pero esta vez fue Sharapova quien resistió. En el noveno juego Henin logró el ansiado break. Servía para llevar el partido al tercero, pero lo desaprovechó. Luego volvió a quebrar y ya con su servicio ganó el segundo 7-5.
Maria, que llegó al Masters por la renuncia de Venus Williams, ofreció durante la semana el mejor juego de una temporada gris, marcada por las lesiones y en la que sólo pudo ganar un torneo.
"En el primer set estuve muy nerviosa. No pude empatar a seis, pero en el segundo fui más agresiva. El tercer set fue una batalla más física y mental", dijo Henin. Y en esa batalla la belga resultó vencedora.
La número uno se disparó hasta un 3-1 en el decisivo set, pero esta vez era la rusa la que quería vender cara su derrota. Se recuperó hasta el 3-3, y ahí murieron sus posibilidades, pese al aliente de los españoles. Henin quebró en el séptimo y lo refrendó luego con su servicio. 5-3 a favor, la belga decidió atacar a Maria, que salvó hasta cuatro bolas de partido hasta que dejó un drop en la red que daba a Henin un sufrido triunfo.
Fue una batalla y otra vez festejó Justine, quien cerró una temporada colosal. 10 títulos, con un record de 63 victorias y apenas 4 caídas. Una grande. (DPA/AFP/AR)