Saúl Eidilstein no dio lugar a las sorpresas. Funcionó como una aplanadora en el circuito roquense. El joven piloto allense volvió a ganar y anticipó la conquista del bicampeonato en la Copa KIA.
Si hay algo que caracteriza a la categoría es su paridad, cosa que esta vez no existió porque Eidilstein salió decidido a terminar de completar su obra.
El "Rusito" llegó con una gran diferencia. Necesitaba unos pocos puntos para retener el título. Y no tuvo oposición. Arrasó con sus rivales en la serie y después repitió en la final, donde impuso un ritmo que fue imposible de seguir para sus rivales.
Con Eidilstein en otra dimensión, girando por momentos a ritmo de clasificación y en forma permanente apoyado desde afuera por una ruidosa barra que enfundada en ropa naranja llegó desde Allen, lo mejor del espectáculo lo apor
taron Néstor Probicito, Denis Lescano, Adrián Altamirano y Omar Gutiérrez, quien se fue afuera en la primera curva y tuvo que avanzar desde el último lugar.
Entre Probicito, Lescano, sancionado por adelantarse en la largada, y Altamirano se dieron con todo. Se jugaron en cada frenaje y terminaron definiendo la segunda posición en la última vuelta.
En pista quedó segundo el "Charo" Lescano, pero el citado recargo, lo mandó al tercer lugar y ascendió una posición Probicito, el principal candidato ahora a quedarse con el subcampeonato.
Como siempre, la categoría presentó autos que asombran con su confiabilidad. Largaron 12 la final y 11 llegaron en la vuelta del ganador.
Después del triunfo y el título, empezó un verdadero carnaval del equipo de Eidilstein. Todos los integrantes se pusieron remeras naranjas, con la leyenda "Copa KIA, bicampeón".
En el medio de los festejos, el bicampeón señaló que "tengo una gran alegría, estamos haciendo historia en una categoría que mostró un gran nivel".