El 2007 ya era inolvidable para Ángel Cabrera, pero ayer sorprendió con otra "perlita". Volvió a situarse en el primer plano del mundo del golf al conquistar el Abierto de Singapur, con ventaja sobre el fijiano Vijay Singh.
"Fue un día muy duro, con mucho viento", dijo un agotado Cabrera tras una vuelta final de 72 golpes en el imponente Sentosa Golf Club de la ciudad-estado asiática. El "Pato" se llevó un premio de 634.000 dólares por su triunfo, con una marca de 276 impactos ocho bajo el par, uno menos que Singh.
El escolta había comenzado el día seis golpes por detrás del cordobés, pero tras los siete primeros hoyos estaba a sólo dos. Sin embargo, ese gran arranque Singh se desinfló, cometió dos bogeys y erró un putt de seis metros para águila en el hoyo final. Su birdie y su tarjeta de 67 pusieron de todos modos presión sobre Cabrera, que respondió con otro birdie para sellar el triunfo.
"No le dí a la pelota tan bien hoy, en especial en el inicio de la vuelta", reconoció el argentino, 17 del ranking mundial. "Pero trabajé muy duro, arreglé las cosas en el final y ahí empecé a darle mucho mejor a la bola. sabía que Vijay venía haciendo una buena ronda, pero dependía de mí jugar bien en los últimos dos hoyos, y eso es lo que hice", agregó el ganador del US Open, uno de los cuatro Grand Slam.
El certamen de Singapur integra el circuito asiático, que está cada vez más potente y convoca a jugadores de primer nivel mundial. Y el "Pato" lo recordó. "Estoy realmente muy feliz. Más que nada por la calidad del torneo que incluyó a golfistas de la calidad de Singh, (Phil) Mickelson, (Ernie) Els o (Adam) Scott. Es un triunfo muy bueno".
De este modo, Cabrera sumó su segundo título consecutivo, ya que el fin de semana pasado había vencido en el torneo de Maestros en el Olivos Golf Club en la ciudad de Buenos Aires.
Singh, número 13 del mundo, mostró su respeto por Cabrera. "Estaba enfrentando a un jugador que es el campeón de Estados Unidos", arrancó.
"Cuando llegué al segundo lugar me imaginé que ya estaba, que no había mucho más que hacer. No podía pensar que un jugador que ganó el US Open pudiera cometer tantos errores", se lamentó el fijiano.
El último lugar del podio quedó en manos del australiano Adam Scott, ganador en la edición 2006, con 281 golpes, mientras que cuarto se clasificó el estadounidense de origen coreano Jin Park, con 282.
Al mismo tiempo, el inglés Justin Rose se adjudicó, con claridad, el Volvo Masters de golf de Valderrama, que marcó el cierre de la temporada europea. Y en ese circuito, Cabrera también "fue noticia" porque finalizó como el sexto mejor jugador del 2007.
Con 1.753.024 euros acumulados en 13 torneos disputados, el "Pato" se mezcló con los golfistas top. Lo mismo ocurrió con Andrés Romero, quien se ubicó séptimo en ese escalafón, con 1.741.707 euros en 23 certámenes.
Rose, de 27 años, ganó la Orden de Mérito europea, con 2.944.045 euros, 448.000 más que el segundo, el sudafricano Els. (DPA/Télam)