Apareció en los momentos justos y fue el mejor en medio de rendimientos muy regulares. Juan Martín Hernández jugó su mejor partido en Los Pumas y se emocionó hasta las lágrimas en el eufórico vestuario argentino.
El autor de los tres drops afirmó que fue algo "impresionante. Una alegría que me llena". Al toque fue por más y afirmó que "esto no termina acá, hay que festejar pero también pensar en Escocia".
Sobre el partido con los irlandeses, opinó que "fuimos muy superiores" y "si bien tuvimos fallas por la que ellos nos marcaron, nosotros controlamos el juego y cumplimos con lo programado".
Para el apertura, los drops fueron una revancha. "Entraron los que no puede hacer con Francia, pero lo importante es que sirvieron para consolidar el resultado".
Hernández confió que en el cierre, cuando a Irlanda se les escurría la clasificación, sus rivales "estaban desesperados, no sabían que hacer con la pelota, por dónde entrar y se las daban al capitán para que busque pero tackleamos y recuperamos pelotas".