Kimi Raikkonen logró ayer en el Gran Premio de Gran Bretaña su segundo triunfo consecutivo en el Mundial, sumándose a una pelea por el título en la que el español Fernando Alonso le recortó dos puntos al líder, Lewis Hamilton.

Las dos victorias seguidas ubicaron al finés con una unidad más que su compañero en Ferrari, el brasileño Felipe Massa, quien quedó quinto.

El británico Hamilton, pese a salir desde la "pole position", no tuvo una buena prueba, pero sigue sin bajarse del podio

Alonso, con una buen estrategia, volvió a pelear por el triunfo, pero sólo le recortó dos puntos a Hamilton, su compañero en McLaren-Mercedes Benz.

La prueba, que terminó bien para la escudería italiana, empezó mal. A Massa se le paró el motor antes de la salida.

Tenía que partir último desde el "pit lane", por lo que se despedía al triunfo. Raikkonen lo intentó en la salida, tratando de emular lo sucedido en Francia la pasada semana, pero esta vez Hamilton se defendió bien.

El ritmo de Ferrari era mejor que el de las "flechas de plata". Massa emprendió una frenética pelea por remontar posiciones y transcurridas apenas seis vueltas ya era décimo.

Raikkonen pisaba los talones a Hamilton, al que estuvo a punto de superar. Así las cosas, se llegó a la primera parada en boxes.

Hamilton fue el primero en hacerlo y perdió dos lugares. Entró en la vuelta 15 y casi se lleva a al mecánico que sostenía la manguera de combustible.

Raikkonen lo aprovechó para, ya en solitario, encabezar y marcar las vueltas más rápidas. En el giro 18 fue su turno y al regresar lo hizo por delante del británico, quien no encontraba el ritmo.

Alonso era ahora líder. El español salió más cargado desde la tercera plaza, paró en la vuelta 20 y el paso por boxes fue veloz, lo que le permitió salir por delante de Raikkonen y Hamilton.

Mientras Alonso y Raikkonen peleaban por el triunfo, Hamilton iba perdiendo tiempo y se conformaba con el tercero lugar.

El segundo repostaje iba a ser vital. A 23 vueltas entró el líder, Alonso tuvo que cargar bastante combustible y se fue a más de ocho segundos. Raikkonen aprovechó entonces seis vueltas para girar en solitario y volar sobre el asfalto de Silverstone.

Se definía la prueba. Cuanto más tardara en repostar Raikkonen, peor se le ponían las cosas a Alonso, mientras que Hamilton no tenía ninguna opción.

A falta de 17 giros entró en boxes el Ferrari del finlandés. Y salió delante de Alonso. Si iba a suceder ya algo, sería sobre la pista. Raikkonen, Alonso y Hamilton no se presentaron batalla y dieron por buenas sus posiciones. Ferrari demostró su progreso y su buen rendimiento. (DPA y AR)