La candidatura de Argentina se agigantó cuando Alfio Basile dio las primeras pistas del equipo que sería titular. El mix que conforman Lionel Messi, Juan Román Riquelme, Juan Sebastián Verón y Hernán Crespo resulta muy tentador e incluso "injusto" para otros casos, como el de Carlos Tevez, quien ya se ve en el banco (ver aparte).
Con las figuras de Brasil mirando la Copa América por tevé, las miradas (muchas veces inquisidoras) se posan sobre el talento de los players de Basile.
Ayer fue tiempo de festejos. El destino unió en fecha el talento, ya
que Riquelme y Messi soplaron velitas. Ellos se abren como los dos fantásticos de un cuadrado en llamas: JR atraviesa un momento brillante y Lionel se consolidó en Barcelona y viene de hacer maravillas "maradoneanas" (la apilada y el gol con la mano) en el último tiempo.
El regresado 'Topo' Gigio llegó a los 29 y está en su plenitud, física y mental. La 'Pulga' más mimada,con 20 junios, no deja de asombrar al mundo y su techo por ahora no se divisa.
Juntos son un dúo que agiganta la máxima candidatura. Sus pies parecen contener la llave para volver a abrir las puertas de la gloria, cerradas desde 1993, cuando de la mano del 'Coco' Argentina se alzó con la Copa América en Ecuador.
Porque dentro del plantel albiceleste hay una certeza: no existe lugar para una nueva frustración. Y Venezuela emerge como el escenario para la redención de jugadores castigados (Verón, Riquelme) y otros a los que se les ha negado sistemáticamente la gran alegría de un título (la 'Bruja', Crespo, Zanetti). Sin dejar de lado que esta Copa debe transformarse en la incubadora para una nueva generación de grandes futbolistas.
Esta selección acarrea con un lastre de 12 años de sequías continentales y, por lo que manifiestan una y otra vez sus protagonistas, ese peso alienta el hambre de gloria. Lo saben incluso quienes caminan por la vereda de enfrente, como el entrenador brasileño Dunga, que no para de elogiar al 'Coco' y sus muchachos. Lo que dijo de Riquelme habla a las claras: "Es un gran campeón, un jugador determinante, una mezcla de futbolistas argentino y brasileño", confesó.
Por la actualidad de varios de sus jugadores y la irregularidad de los demás equipos, Argentina pisa fuerte. Además el clima de hermandad que impera en el plantel permite soñar con mayor fuerza en la vuelta olímpica versión venezolana.
Ayer, los muchachos estuvieron de festejo, en una coincidencia a puro talento: Messi llegó a los 20 y Román a los 29. El único que no logró esconder su tristeza fue Carlitos Tevez, y esa ambivalencia sintetiza las ganas de triunfar... Y de estar.
de un cuadrado mágico