Fue un partidazo. De esos que despiertan el deseo del amante del fútbol de que los 90 minutos no se extingan. Cambiante y vibrante, el empate 3-3 entre Boca y Argentinos dejó al equipo de Miguel Russo con un sabor amargo entre los labios.
Es que el San Lorenzo de Ramón Díaz había tropezado el sábado ante Vélez, y River se quedaba con un punto ante Independiente. Boca tenía la chance de ponerse a una unidad del único líder y comenzar a meter verdadera presión. Pero lo dejó escapar.
Y de la peor manera, ya que con mucho tezón y bastante fútbol dio vuelta un resultado (2-0) que se abría como una parada bien complicada.
El team de Russo pocas veces estuvo en problemas como ayer en el Diego Armando Maradona. Pero además, el 'Bicho' dejó al descubierto una grave grieta en el juego aéreo de Boca, ya que le convirtió los tres goles de cabeza. El 'xeneize', a la vez, le contestó con tres goles de mediana y larga distancia.
El local pegó con rapidez y cuando recién se cumplían 26 minutos ya ganaba 2-0, con goles de Gonzalo Choy González (la figura) y Leonel Núñez. Si bien la diferencia no era tanta el 'Bicho' era mejor hasta ese momento, sobre todo por la supremacía que supieron imponer sus volantes. A los 31 el descuento de Neri Cardozo trajo un poco de tranquilidad.
En la segunda parte Argentinos cedió terreno y dejó crecer a la mitad de la cancha de Boca. A los 13 un centro de Cardozo fue peinado por Juan Pablo Avendaño y Palermo conectó una volea de derecha que venció a Pontiroli e igualó el partido. El escolta siguió mejor y pasó al frente pocos minutos más tarde con otro golazo, esta vez a cargo de Hugo Ibarra, que avanzó desde la derecha hacia el medio y desde afuera del área sacó un imponente zurdazo que dejó estéril a Pontiroli.
Boca lo pudo liquidar, pero lo que erró en el arco ajeno lo sufrió en el propio. Así, a los 28 otra vez surgió Choy González y lo dejó con toda la bronca.