El francés Sebastien Loeb volvió ayer al triunfo, después de dos pruebas complicadas en la nieve, y se impuso en el Rally de México, la cuarta fecha del Mundial de la especialidad.
Loeb, con un Citroën C4 que funcionó sin problemas durante toda la prueba, aventajó a los finlandeses Marcus Grönholm y Mikko Hirvonen, ambos con Ford Focus.
Fue la segunda victoria del equipo franco-monegasco, después del de Montecarlo en enero último, y del triunfo número 30 de la campaña de Loeb, record absoluto en WRC.
Loeb se instaló al frente del rally el pasado viernes, cuando el noruego Petter Solberg abandonó después de la quinta prueba especial a raíz de una pérdida de aceite en su Subaru.
Con Solberg fuera de la competencia, Loeb dominó con solvencia un rally que ya había ganado el año anterior con su Citroën Xsara de la escudería belga Kronos.
Con este triunfo, se acercó dos puntos más a Grönholm y se puso a cuatro puntos de su gran rival en el Mundial.
El triple campeón mundial ganó seis de los veinte tramos especiales, pero siempre logró mantener a distancia a los Focus oficiales.