NEUQUEN (AN).- Bicicross Senillosa se quedó con el grito de campeón en la garganta. Tenía que ganar para dejar sin chances a Petrolero, pero no pudo con Independiente, que se impuso por 2 a 1. Algunos piedrazos entre las hinchadas en el final del partido, por suerte sin consecuencias mayores, le pusieron un final violento a la tarde futbolística.

Arrancó mejor Bicicross, porque ocupó con criterio los espacios y mostró ambición. Si bien la apertura del marcador llegó de un penal dudoso, era merecida la diferencia para la visita.

Para seguir con las dudas, a los 27 minutos, le anularon el segundo a Bicicross por una supuesta posición adelantada. Era el 2-0, pero no fue convalidado.

Después el dominio pasó para el lado de Independiente, que llegó a la justa igualdad a las 35.

El "rojo" fue superior en el complemento, porque los de Senillosa se desordenaron, más aún cuando quedaron con uno menos. El local pasó a ganar en el final, con absoluta justicia.