| En la previa, todo apuntaba a darle "pelea" a la violencia. Dos chicos, con las camisetas de los elencos que se enfrentaban ingresaron de la mano hasta el medio de la cancha, después un grupo religioso recorrió el campo con una bandera que expresaba: "Un mensaje de Dios, basta de violencia". Por primera vez, los equipos se formaron como fue habitual en el Mundial, en fila y, antes de empezar el juego, los jugadores se dieron la mano. " Sobre la hora: Poco antes de iniciar el encuentro no había clima, porque las tribunas estaban casi vacías. En pocos minutos todo cambió y unas 4.000 almas vieron el triunfo del "albinegro", en una tarde-noche agradable, después del viento que sopló en el Alto Valle. |