| | Boca dejó en claro ayer (como si hiciese falta) que está intratable. Es que en su cancha estaba siendo vapuleado por Vélez, que le ganaba por dos goles y lo tenía para el cachetazo. Pero lo peor que pudo hacer el equipo de Russo fue dejarlo vivo. Y lo pagó carísimo, porque el campeón se lo dio vuelta y se aferró com nunca a la punta de la tabla. Fue un partidazo, para no perdérselo. Boca fue una sombra en el inicio, lo que alimentó algunas críticas en torno a Ricardo La Volpe. Vélez sacó provecho de todas las ventajas que dio el puntero del torneo y mediante Maximiliano Pellegrino y Mauro Zárate se fue al descanso con un 2-0 contundente. Claro, en la parte final de los 45 iniciales este Vélez entró en un cono de sombras, aunque nadie preveía lo que vendría. Pero lo cierto es que en ese tiempo fue amo y señor, pero pagó carísimo la falta de resolución en los últimos metros del campo, sobre todo por impericia de Javier Robles y Castromán. La apertura del marcador llegó a los 27, cuando el debutante Robles ejecutó un córner desde la derecha y nadie marcó a Maximiliano Pellegrino, quien metió un cabezazo imponente. Boca se hundió y el segundo cayó a los 34, vía el menor de la dinastía Zárate. Además vio la roja Krupoviesa, por una equivocación de Baldassi, y el panorama se oscureció más para el 'xeneize'. En el segundo tiempo, Vélez pretendió especular con la previsible desesperación de Boca, pero en su intención de hacer lento el juego no hizo más que facilitar que el local se agrandara, sacara fuerzas de donde no las tenía, y llevara el encuentro hasta el área adversaria. Desde ahí, sólo hubo un jugador de la visita: el "Gato" Sessa. Pero ni la gran tarde del arquero pudo evitar lo inevitable. Vélez se quedó con 10 hombres, y a los 23 Fernando Gago marcó su primer gol en Primera con una joyita que se clavó en el ángulo. Morel Rodríguez y Gago empujaban de tal forma que se veía venir la igualdad. Para colmo ingresó el pibe Andrés Franzoia y revitalizó el ataque. Entonces a los 30 Morel metió un pelotazo largo y Palacio, hasta entonces errático, ganó en velocidad y empató ante el achique de Sessa. Vélez estaba descontrolado cuando la armaron Gago, Franzoia y Pablo Ledesma y la terminó, como siempre, Palacio. Así, Boca conservó la punta y mirará desde arriba a River en la antesala del superclásico después de un partido que pudo haber sido una catástrofe y terminó en un festival.
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